Para la historia: Ejército sin responsabilidad en 2 de octubre y Ayotzinapa

De Primera Mano

Por Francisco Javier Ruiz Quirrín

QUIZÁ y figuras insignes de la izquierda en México como Heberto Castillo, Demetrio Vallejo, Arnoldo Martínez Verdugo y muchos más adoradores de la hoz y el martillo, se estén revolcando en su tumba, pero alguien que presumiría su “actitud revolucionaria y transformadora” como el Presidente López Obrador, acaba de liberar al ejército mexicano del lado oscuro de la historia.

Y escogió una fecha especial para hacerlo: El 2 de octubre.

En el arranque de la semana y durante su “mañanera”, el primer mandatario de la nación estableció que las fuerzas armadas “solo han obedecido órdenes” y con ello los sacó de la condena histórica compartida con los responsables de la matanza del 2 de octubre en Tlatelolco.

Las y los mexicanos de pensamiento izquierdista, al paso de 55 años de luchas por los cambios que arrebataran cuando menos parte del poder de las fuerzas más reaccionarias del país, habían sentado en el camión de los criminales a los integrantes del ejército mexicano, con o sin razón.

Ahora, el hombre que ocupa la Presidencia de la República, quien presume todos los días “no ser igual” a los corruptos del pasado, se ha dignado en disculpar a los señalados por la izquierda mexicana como “el símbolo de la represión del gobierno contra el pueblo”.

Sin duda, el pensamiento de este “transformador” como se autodefine el Presidente, ha cambiado de opinión, porque pasó de ser un borracho a manejar la cantina.

Como opositor al sistema al gobierno, asumió su papel de crítico por el uso de las armas para reprimir al pueblo”.

Hoy que es Presidente, las fuerzas armadas son unos de sus brazos principales para controlar el país, el que ha militarizado, tal y como lo hicieron en sus países Fidel Castro, Hugo Chávez y Daniel Ortega.

Ayer martes y en su “mañanera”, López Obrador dijo lo que el Presidente Enrique Peña Nieto debió haber dicho al presentar los resultados de las investigaciones por la desaparición y asesinato de 43 estudiantes normalistas de Ayotzinapa: “Los hechos, se dieron por decisiones tomadas por las autoridades locales, en acuerdo con grupos delincuenciales”.

Peña Nieto asumió la responsabilidad histórica de aquel acontecimiento, porque lo que permitió trascender es que todo había sido “un crimen de Estado”. Por eso ahora está en la cárcel – a pesar de tener más de setenta años de edad y por cumplir como Procurador General de Justicia-, Jesús Murillo Káram.

López Obrador dijo que en los hechos de Iguala, en Guerrero, “pudieron haber participado algunos elementos de las fuerzas armadas, pero no todos” y todo fue originado “por las autoridades locales en acuerdo con bandas delincuenciales”.

En efecto. El alcalde de Iguala era José Luis Abarca, quien con su esposa María de los Ángeles Pineda, fueron señalados como quienes participaron directamente en la desaparición de los 43 estudiantes, por deseos del crimen organizado.

Aquella tragedia, ha sido utilizada por la 4-T como argumento propagandístico para señalar la corrupción de los gobiernos del pasado.

AMLO dejó muy en claro además, que “ni Peña Nieto ni el general Salvador Cienfuegos (titular de la SEDENA en el sexenio 2012-2º18) habían tenido participación en los hechos”.

Vaya reacomodo histórico.

HERIBERTO Aguilar, el dirigente de MORENA en el Estado, reiteró ayer durante entrevista para TVD PRIMERA PLANA, que “se reservaba el derecho de admisión a ese partido, porque no se admitiría a una figura como Manlio Fabio Beltrones”… Dijo estar convencido del gran reconocimiento y afecto que el pueblo de Sonora le tiene al Presidente de la República y al Gobernador del Estado… En referencia a la respuesta de Beltrones a su expresión (“Ni loco que estuviera. Son unos mediocres y ahí están los resultados”) Aguilar aseguró que sí había buenos resultados del gobierno de la cuarta transformación, aunque no quiso meterse en temas como la imparable inseguridad pública o las crisis en el sector salud… Por su lado, Rogelio Díaz Brown, presidente del comité directivo estatal del PRI, dijo que era bueno que MORENA se reservara el derecho de admisión, “porque si Beltrones estuviera ahí, ya los hubiera corrido por “malos, por improvisados y por estar haciendo sufrir a la gente por mediocres”.