Reaparece Marcos y emplaza a Peña

REFORMA
El subcomandante Marcos emplazó al Gobierno de Peña Nieto a cumplir los compromisos asumidos por la Administración priista de Ernesto Zedillo sobre los derechos indígenas.

En una carta difundida anoche, el líder del EZLN expresó: «Queda al Gobierno federal (…) decidir si reincide en la política contrainsurgente que sólo ha conseguido una endeble simulación torpemente sustentada en el manejo mediático, o reconoce y cumple sus compromisos elevando a rango constitucional los derechos y la cultura indígenas, tal y como lo establecen los llamados ‘Acuerdos de San Andrés’, firmados por el Gobierno federal en 1996, encabezado entonces por el mismo partido ahora en el Ejecutivo».

La misiva de Marcos surge luego de la marcha zapatista realizada el pasado 21 de diciembre, en la que más de 30 mil miembros y bases de apoyo del Ejercito Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) marcharon en silencio en municipios de su influencia.

«Nuestro mensaje es de lucha y resistencia (…) Nos hicimos presentes para hacerles saber que si ellos nunca se fueron, tampoco nosotros», se lee en el texto.

Marcos también anunció que, en los próximos días, dará a conocer el plan de acciones «civiles y pacíficas» que emprenderán.

En el mensaje, emitido por el Comité Clandestino Revolucionario Indígena y firmado por el Subcomandante Marcos, se critica el sistema político del despilfarro, la corrupción, la represión y el uso mediático en beneficio propio.

Aclara que mientras el sistema y el Gobierno autodestruyen a la sociedad, ellos han aprendido a sobrevivir trabajando la tierra y buscando su seguridad alimentaria sin dañar el medio ambiente.

«En estos años nos hemos fortalecido y hemos mejorado significativamente nuestras condiciones de vida. En nuestros pueblos, la tierra que antes era para engordar el ganado de finqueros y terratenientes, ahora es para el maíz, el frijol y las verduras que iluminan nuestras mesas».

En el texto asegura que han creado un mundo propio, autónomo y sustentable, con escuelas propias, servicios de salud con hospitales, clínicas y laboratorios, justicia y respeto a derechos humanos.

Se anuncian también puentes de diálogo con otros movimientos de México y el mundo para construir una alternativa no institucional de izquierda.

Al pueblo de México piden que reconozcan en ellos otra forma de hacer política.

«Somos los zapatistas, los más pequeños, los que viven, luchan y mueren en el último rincón de la patria, los que no claudican, los que no se venden, los que no se rinden».