Repentino paro de transporte en Hermosillo despertó caos y ventiló adeudos

Por Daniel Sánchez Dórame/

Harto de las condiciones laborales y el sistema de transporte público que concesiona el Gobierno de Sonora, un chofer decidió esposarse a la puerta del Centro de pernocta, donde están en resguardo los camiones urbanos, dejando a 100 mil usuarios sin servicio durante la mañana del pasado martes.

Desde las cuatro de la mañana, Guillermo Eleazar Cohen Ramírez, operador de la Sociedad Integradora y Concentradora del Transporte Urbano en Hermosillo, S.A. de C.V. (Sictuhsa), llegó al centro de pernocta y se esposó a la reja de acceso, impidiendo la salida de 250 unidades que se reparten en 20 rutas para brindar el servicio a más de 300 mil usuarios de camiones en Hermosillo (aunque por el periodo vacacional el aforo disminuye a una tercera parte).

En un recorrido por las calles de la capital de Sonora, se notaba la falta de camiones urbanos, las paradas de autobuses lucían atiborradas de usuarios que no tuvieron opciones para llegar a su destino.

«Nunca nos pagan a tiempo, siempre nos regatean el salario y a pesar que el contrato estipula prestaciones laborales, en Infonavit nos niegan créditos porque la empresa y el Gobierno no pagan cuotas; también nos niegan servicios de salud y ahí andamos pagando doctores ‘similares’; además que estamos a 45 grados de calor y las unidades no tienen refrigeración; nuestra condición laboral es precaria y eso pone en riesgo a los usuarios porque los camiones tampoco reciben mantenimiento», detalló el chofer inconforme, visiblemente cansado y con las muñecas rasgadas por las esposas.

Guillermo Eleazar, quien maneja un camión de la Ruta 19, permaneció esposado por más de cinco horas, pero al sitio de la manifestación nunca llegaron funcionarios de la Dirección General de Transporte en Sonora, a cargo de Prisciliano Meléndrez Barrios.

Como muestra de solidaridad, un centenar de choferes del Sictuhsa bloquearon el tránsito vehicular sobre la avenida Lázaro Cárdenas en el cruce con bulevar Solidaridad (Periférico Poniente), afectando a miles de automovilistas que diariamente circulan por esas concurridas calles.

 Aprovechan para ventilar adeudos

Alrededor de las dos de la tarde el servicio se reanudó a cuentagotas, una vez logrado un acuerdo entre los directivos de Sictusha y Guillermo Eleazar.

“Nosotros hicimos compromisos con los trabajadores de que vamos a pagar puntualmente la nómina semanal y también nos vamos a poner al corriente con las deudas con Infonacot e Infonavit”, anunció José Luis Gerardo Moreno, gerente de la empresa de transporte.

Explicó que los problemas de liquidez de la empresa se les han venido encima desde mayo pasado, a raíz de la entrada en circulación de unidades administradas por el gobierno del Estado.

“Nosotros somos los responsables de prestar el servicio, pero no nos han generado condiciones para poder prestar un servicio sustentable y suficiente para la ciudad”, dijo refiriéndose al Gobierno del Estado.

Por su parte, el director de Transporte Estatal, justificó que el origen del paro momentáneo era un conflicto entre un particular y Sictuhsa. En sus facultades sólo atendieron poniendo en circulación unidades emergentes, más 50 que ya estaban en rutas.

Cuestionado por la falta recursos del subsidio al transporte, que acusaba la empresa, Meléndrez Barrios negó que el Estado les deba.

“Existe un subsidio que se otorga por pago de los estudiantes y derivado de ello pudiera existir algún pago que no se ha actualizado; si ellos dicen que el Estado les debe “x” cantidad de dinero, es insignificante comparado con lo que Sictuhsa le debe al Estado por concepto de la adquisición de los camiones”.

En este contexto, el funcionario estatal resumió que el problema de la empresa es administrativo.

Cabe recordar que para mejorar el servicio de camiones urbanos en Sonora, el Gobierno del Estado solicitó un préstamo de 600 millones de pesos como parte del Fondo para la Modernización del Transporte (FEMOT), los cuales supuestamente fueron ejercidos sin que hasta el momento se note la mejoría o cual fue el destino del recurso, pues a la fecha, la mayoría de las unidades no cuentan con mantenimiento básico o aire acondicionado.