Abortar, es matar

Es la violencia más cruel y despiadada contra el ser humano más indefenso e inocente

Por Nancy Burruel de Salcido

El aborto es un acto en el que siempre muere uno: el bebé. Teniendo claro esto, debatir sobre aborto sale sobrando porque el primer derecho humano es el derecho a la vida.

Pero el Lobby abortista alega que el feto no es un ser humano sino un saco de células, y entonces, si no es un ser humano, se le puede matar.

La ciencia, por el contrario demuestra que desde el momento de la concepción hay vida humana y que el bebé ya cuenta con un ADN e incluso grupo sanguíneo distintos de los de la madre que lo gesta.

El aborto es la violencia más cruel y despiadada contra el ser humano más indefenso e inocente. Si permitimos que una madre mate a su propio hijo ¿Cuánto falta para que sea legal matarnos unos a otros? ¿Qué valor tiene la vida en una sociedad así?

En octubre de 2008 miembros de “Poder Sonora” y otros grupos pro-vida y pro-familia, bajo Red Familia, lograron blindar a Sonora contra el aborto. ¿Cómo se blindó? Se reformó el artículo 1º. de nuestra Constitución para otorgar, a todos los nacidos en Sonora, los derechos de esta Constitución, desde el momento de la concepción.

Después de esta reforma de Sonora, vino un efecto dominó en el país y en cascada se blindaron 17 estados más, en menos de 6 meses. Hoy son 22 estados blindados lo cual es un claro indicio de que el pueblo mexicano ama, cuida y tutela toda vida humana.

Los embates contra la vida y la familia en este nuevo gobierno han sido perniciosos y constantes. A través del partido en el poder presentan iniciativas en los estados para legalizar el aborto y las uniones homosexuales a través de los Congresos locales y cuando no les resulta porque el pueblo se une, tratan de hacerlo a través de la SCJN, pisoteando así la soberanía de los estados.

Las feministas hoy quieren posicionar el 28 de septiembre como “El día del Aborto Libre y Seguro”. El contrasentido es que una de las razones para “exigir” la legalización del aborto era su alegato de que el “clandestino” es inseguro. Hoy por la pandemia lo promueven en casa y venden a través de internet medicamentos como Misoprostol, con instrucciones para su uso indiscriminado y riesgoso, pero asegurando, ahora sí, que el aborto en casa es “totalmente seguro”.

Es claro por todo lo anterior que el feminismo no pretende mejorar la vida de la mujer ni pelea por la justicia y equidad. Ellas no piden recursos para mejorar los servicios de salud para las mujeres, ni guarderías para sus niños, ni más fuentes de empleo o apoyos en razón de ser madres. NO, ellas tratan de imponer con violencia una agenda internacional cuya meta principal es el aborto y la normalización de la homosexualidad, con el fin de disminuir la población mundial.

Esta agenda está respaldada por la industria farmacéutica y personajes como Bill Gates y George Soros, pero también por la ONU, la OMS, los medios de comunicación, Hollywood, etc, etc., etc, que derraman miles de millones de dólares a estos grupos feministas pero también a los gobiernos para que impongan la ideología de género con su agenda abortista y homosexual.

El 28 de septiembre ayúdanos en Twitter con el hashtag #NoHablenPorTodas para que todas las mujeres les digamos a las feministas abortistas que no nos representan y dar cauce así a las demandas de verdadero apoyo a la mujer.

*Nancy Burruel, activista social, integrante de la agrupación “Poder Sonora”.