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Los supermercados Santa Fe presentan síntomas de fase terminal

Por Feliciano J. Espriella/

Cuando una persona enfrenta una enfermedad incurable, a medida que se acerca el fatal desenlace su lamentable situación se empieza a reflejar en la anatomía, principalmente en su fisonomía. Lo mismo sucede con las organizaciones.

Desde hace varios meses los Supermercados Santa Fe han venido presentando síntomas de paciente en fase terminal. Basta entrar a cualquiera de sus establecimientos para corroborarlo. Principales síntomas:

-Reducción sistemática y continua de clientes.

-Anaqueles semi vacíos.

-Espacios cada vez más amplios, producto del retiro constante de anaqueles que se vaciaron y no tuvieron productos para colocar.

-No reposición de los productos que se van agotando.

-Y algo verdaderamente inusual en estos comercios, no actualización de precios.

Me parece que no llegarán a terminar el año operando. Incluso posiblemente no aguanten más de un mes.

La ignominiosa historia de VH

Hace seis años, los entonces supermercados VH presentaron la misma sintomatología que hoy evidencian sus sucesores. Sus propietarios, el ex poderoso Grupo Valenzuela que para entonces ya había perdido la mayor parte de sus empresas, las mantuvieron artificialmente con vida y prolongaron innecesariamente la agonía.

El desenlace fue sumamente doloroso y perjudico a una gran cantidad de personas. Empleados, proveedores y dueños de los inmuebles que rentaban sufrieron fuertes quebrantos patrimoniales. Hubo pequeños comerciantes de la región quebraron al no poder cobrar las facturas que les adeudaba la cadena VH.

En la edición 1968 de este semanario, en relación al cierre definitivo de los establecimientos, publique el 5 de junio de 2009, lo siguiente:

“Desde hace varios meses en los que se les dejó en claro y se les recalcó que inmersos en procesos judiciales como los que vienen arrastrando desde hace varios años, nadie los podría ayudar aunque quisiera (algo que como empresarios sabían perfectamente), se hizo evidente que el fin había llegado ¿Por qué entonces prolongar la agonía dilapidando recursos que bien pudieron servir para el liquidación del personal? Los motivos sólo ellos los conocen, pero es evidente que fue premeditado y a sabiendas que el único final posible sería el que se dio. De cualquier manera lo hicieron con recursos que no eran de ellos: vendiendo sin reponer (y mucho menos pagar) los inventarios. Me parece que la estrategia fue hacer tiempo y detonar el problema cuando lo consideraran pertinente”.

Finalmente quebraron, algunas de los establecimientos cerraron definitivamente. La mayor parte pasaron a ser propiedad de los actuales propietarios de los supermercados Santa Fe, connotados y conocidos productores primarios de los estados de Sinaloa y Sonora.

Y en algunas otras tiendas negoció directamente con los propietarios de los inmuebles Servando Carbajal para integrarlas a la cadena Súper del Norte. Todas ellas continúan operando sanamente con éxito y normalidad,  pero más importante todavía, el personal conservó el empleo.

Cabe destacar que Carbajal les hizo varias propuestas al Grupo Valenzuela para absorber toda la cadena de supermercados y farmacias, con lo que se hubiera evitado la pérdida de empleos y el despojo que se les hizo a la mayoría de los empleados en el monto de sus indemnizaciones.

El productor primario suele ser mal comerciante

En múltiples ocasiones ha sucedido en el ámbito empresarial que productores agrícolas, ganaderos o de alguna otra actividad primaria incursionen en el comercio con la intención de integrar una cadena económica que les permita mejorar sus rendimientos. Una gran cantidad han fracasado en sus intentos.

Ha sido, según demuestran los hechos, más frecuente que los comerciantes incursionen con éxito en actividades primarias. Me parece que hay cierta lógica en ello.

¿Se repetirá la historia?

Desde hace semanas se viene rumorando que los actuales propietarios buscan alternativas para traspasar la cadena. Hay incluso quienes aseguran que ya se concretó el trato con una cadena de supermercados sonorense, lo cual hasta la fecha no es verdad.

Hay negociaciones efectivamente pro con dos cadenas de autoservicios, una de cobertura nacional y otra local, pero sin amarrar todavía acuerdos con ninguna.

Como sonorenses deseamos que el fallo sea favorable para nuestra gente. Representaría un gran beneficio para Sonora. Es de sobra conocido que empresas de este tipo importan de sus lugares de origen una gran cantidad de los productos que manejan, y dejan al margen a los nuestros. Además, salen del estado las utilidades que generan y las reinvierten en otras regiones  del país.

Ojalá no suceda como hace seis años y por no llegar a acuerdos rápidamente continúen operando más tiempo que el que evidentemente ya se agotó. Otra quiebra estilo VH sería muy lamentable y dolorosa.

Por hoy fue todo, gracias por su tolerancia y hasta la próxima.