Recuerdan al padre Hugo Montaño como un sacerdote inalcanzable

Por Antonio López Moreno

La madrugada de este 30 de julio el virus COVID-19 alcanzó a una reconocido personaje de la vida religiosa en Sonora, al confirmarse el fallecimiento del padre Hugo Montaño Terán, sacerdote por más de 40 años y con andanzas que son recordadas por la feligresía de la entidad.

Armando Armenta, cronista de la arquidiócesis de Hermosillo lo recuerda como un sacerdote inalcanzable, entregado y de profunda vida espiritual.

“Era un sacerdote de mucha vida de oración, de una profunda espiritualidad en la palabra de Dios, en los evangelios, en la búsqueda de la fe en Jesucristo. Tenía esa particularidad, él oraba mucho con la gente”.

Hugo Montaño Terán nació el 10 de agosto de 1941 en Moctezuma, Sonora. Por jugadas del destino migró al municipio de Agua Prieta en donde pasó su niñez y juventud.

En 1959 ingresó al Seminario con el deseo de convertirse en fraile, misma ordenación que obtuvo en septiembre de 1970. Durante sus estudios litúrgicos fue fundador del Seminario Mayor de Hermosillo, en una etapa donde le tocó ser parte de cambios radicales en la iglesia católica por los cambios del Concilio Vaticano II.

A través de los años fue vicario cooperador en la Capilla del Carmen y en la Parroquia San Juan Bosco, así como también fue párroco en las iglesias de Nuestra Señora de Guadalupe, Espíritu Santo, Fátima, Santísima Trinidad y San Francisco de Asis.

La feligresía en redes sociales lo recuerdan como un párroco entregado a la comunidad que hasta sus últimos días trabajó por los más pobres.

(Ehui Noticias)