Rincones de Hermosillo a través del tiempo

Por Miguel Gálvez

¿Te has puesto a pensar qué hubo antes o cómo eran esos edificios, o calles por donde regularmente pasas?

“Primera Plana” realizó un ejercicio de comparación en algunos puntos icónicos de la ciudad. Un rápido viaje en el tiempo para asomarnos cómo la evolución de la tecnología y el avance de la ciudad han ido pintando un rostro distinto en el paisaje urbano.

Edificio Banco de México

Utilizado por el Estado, como oficinas de la Secretaría de Hacienda, anteriormente ocupado por Banco de México (1967). Desde que se tomó la foto, han transcurrido 52 años, lo cual nos deja apreciar cómo varios de los edificios aledaños han sido derrumbados o remodelados mientras que esta creación del reconocido Arquitecto Gustavo Aguilar, sigue intacto.

Cine Sonora

El edificio del legendario Cine Sonora, con un diseño innovador también del Arq. Gustavo Aguilar Beltrán inaugurado en 1947, hizo las tardes de delicias para muchos hermosillenses durante décadas. La fisionomía de esta equina de Juárez y Colosio (antes Yucatán) ha cambiado y actualmente su lugar lo ocupa una pequeña plaza comercial.

Primaria Leona Vicario

Inaugurada el 5 de febrero de 1910, en el marco del 53 aniversario de la Constitución de 1857, fue construido el colegio para niñas Leona Vicario que posteriormente fue reasignada como primaria Leona Vicario como actualmente la conocemos. Cabe destacar la infraestructura se ha mantenido igual como en sus inicios.

Presa Abelardo L. Rodríguez.

Creada a petición del gobernador de Sonora, Abelardo L. Rodríguez, el 6 de abril de 1948 se inauguró esta obra hidráulica. Estaba muy alejada del epicentro de la actividad citadina, hoy está rodeada de colonias como el Ranchito, Las Amapolas; y actualmente cuenta con escasa agua.

Bugambilias

Si bien, no hay una fecha exacta de esta foto, nos muestra cómo ha pasado el tiempo… Aún no se desarrollaba Las Bugambilias. Aquí la urbanización tuvo un importante crecimiento, y hoy incluso llega hasta los cerros del fondo. La fachada que atraviesa la calle Juárez de punta a punta, sigue ahí.