GeneralPrincipales

“Bet-El” ayuda bridando alimento a pequeños de escasos recursos

Un humilde matrimonio fundó hace cuatro años el comedor comunitario al norte de Hermosillo, en donde los pequeños obtienen su única comida del día y refuerzan sus valores para no caer en el mal camino

Un humilde matrimonio fundó hace cuatro años el comedor comunitario al norte de Hermosillo, en donde los pequeños obtienen su única comida del día y refuerzan sus valores para no caer en el mal camino

 

Por Antonio López Moreno

Lo que empezó como una pequeña obra de caridad ha logrado ser el sustento para decenas de niñas y niños en la periferia de Hermosillo, Sonora.

Un humilde matrimonio fundó hace cuatro años el comedor comunitario “Bet-El”, en donde los pequeños obtienen su única comida del día y refuerzan sus valores para no caer en el mal camino.

“Los niños no tienen los recursos para comer las tres veces al día, más que la pura cena que nosotros les brindamos aquí”.

La hermana Regina Yocupicio, como se le conoce a la fundadora del comedor, inició hace cuatro años su labor junto con su esposo, con el poco recurso que obtenían.

“Nosotros iniciamos con mi sueldo y con el sueldo de mi esposo, porque yo trabajaba en fábrica y él es yesero, a veces tiene, a veces no y así lo reuníamos el dinero, empezamos a comprar, a comprar y así empezaron los vecinos a traernos un puré, un cubito”.

 

Movidos por ayudar

La idea nació cuando no pudieron soportar los rostros de los pequeños hambrientos en su colonia.

“Que si tenía un taquito de frijol, que si tenía algo que les brindara, una comidita que porque tenían mucha hambre y pues no tenían nada en su casa, así mi esposo fue haciéndoles comida, desayuno y así empezaron a venir, se empezaron a sumar más niños, más niños, hasta que se nos salió de control”.

Su pasión por ayudar a los más necesitados fue la mayor motivación.

“Los mismos niños siempre nos siguen a mi esposo y a mí y pues llegamos aquí y empezaron a llegar dos, tres niños que se la llevaban en la calle”.

 

Cada vez son más

Al comedor Bet-El llegan más de 35 niños todos los días, sin embargo en Navidad y fechas festivas, son hasta 80 pequeños los que buscan un plato de comida.

“Nunca habían comido carne asada hasta ahora que vino el muchacho a traerles esa cena”.

En punto de las 19:00 horas la casa de Doña Regina se llena de sonrisas y algarabía por tantos infantes, pero antes de comer, les imparten clases para reforzar su aprendizaje y fomentarles valores fundamentales.

“La maestra de ellos les enseña, yo también les hablo un poco de la palabra, tenemos biblias ilustradas para ellos también y necesitamos enseñarles valores, porque eso ya se perdió”.

 

Requieren ayuda también

Hoy en día, el comedor requiere de ayuda para poder alimentar a los visitantes, si usted gusta donar, puede realizar un depósito al número bancario 5512 3824 0703 0842. También puede realizar donaciones en especie en la calle San Joel de la colonia Villa Verde, cualquier alimento será bienvenido.