Juez exonera a otra funcionaria del IMSS implicada en el caso ABC

Por Daniel Sánchez Dórame/

El Juez Primero de Distrito exoneró de toda responsabilidad en el incendio de la Guardería ABC a Irma Crecencia Díaz Gómez, ex coordinadora de Estancias Infantiles del IMSS en esta capital de Sonora, implicada en la muerte de 49 bebés y lesiones en más de 70 menores de edad.

Gabriel Alvarado Serrano, abogado del grupo Manos Unidos por Nuestros Hijos que integra a padres de las víctimas de la tragedia ocurrida el 5 de junio del 2009, lamentó que el encargado de impartir justicia haya concedido un recurso por desvanecimiento de datos dentro de la causa penal 126/2009, donde la ex funcionaria del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) estaba acusada por los delitos de homicidio doloso y lesiones, acumuladas; además de ejercicio indebido de funciones.
«El Juez tomó en cuenta los mismos argumentos por los que exoneró a Delia Irene Botello Amante (ex coordinadora Zonal de Guarderías del IMSS en Sonora), en esencia consideró que no tienen las responsabilidades que originalmente se le habían imputado por lo que la exonera sin esperar a que concluya el proceso penal, eso es lo que se llama libertad por desvanecimiento de datos y podría concederse el mismo beneficio a otros funcionarios públicos», explicó el abogado de los padres.
En lo que va del 2014, Irma Crecencia es la segunda ex funcionaria del IMSS exonerada de su responsabilidad en la tragedia infantil más grande de México, pues el 1 de enero recuperó su libertad Delia Irene, cuando su defensa legal presentó elementos de prueba que supuestamente desvanecían las evidencias que el Juez había considerado en el momento que decidió someter a proceso penal a las ex Coordinadoras de Guarderías, zonal y de Hermosillo, en la fecha que sobrevino el incendio.
De 22 personas sujetas a juicio por su responsabilidad en la tragedia de la Guardería ABC, entre socios de la subrogación del IMSS y funcionarios de los tres órdenes de gobierno, solo quedan 18 presuntos implicados y ninguno ha pisado la cárcel por la muerte de 25 niñas y 24 niños, además de las lesiones graves en más de 70 niños que tardarán años (algunos nunca se recuperarán) en sanar de las heridas físicas y emocionales.