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Prepara Semarnat operativo de inspección a minas

Por Rigo Gutiérrez E./

“Por instrucción de la Presidencia de la República trabajamos en un programa especial, para revisar las minas y cumplan con la Ley; de no ser así, procederá la sanción correspondiente o clausura”: Ulises Cristópulos, delegado de Semarnat

Los reflectores de las autoridades ambientales ahora apuntan hacia la actividad minera, y es que a raíz de la denuncia de ejidatarios de San Antonio de la Huerta tanto Profepa como Semarnat establecerán un programa para evaluar la situación actual en las comunidades mineras.

Por lo pronto, en el caso de la mina Libertad, instalada en el municipio de Soyopa, determinaron que no existían problemas de tipo ambiental.

Descartan contaminación en San Antonio

Pese a las evidentes muestras y denuncias públicas de los ejidatarios de esta zona ―ubicada a 200 kilómetros al este de Hermosillo―, inspectores de la delegación estatal de la Procuraduría Federal de Protección al Medio Ambiente (Profepa) aseguran que la compañía minera puede continuar trabajando con normalidad.

El jueves 18 de este mes, a través de un breve reporte enviado por la dependencia que coordina Alan Francisco Munro, informaron de las irregularidades: “se detectó que los contenedores con residuos peligrosos no cuentan con identificación y el almacén temporal de residuos, no cumple con los requisitos señalados en la normatividad ambiental”.

Por estas faltas, explican, la empresa sería acreedora a una sanción que puede alcanzar hasta los tres millones de pesos. Además, el informe establece que fueron encontradas otras irregularidades, referentes a documentación: seguros o garantías respecto al cumplimiento de las condicionantes (fianza), monitoreos de agua, programa de mantenimiento preventivo para el equipo. Todas fueron solventadas.

A ojos de las autoridades federales, y tras los estudios realizados en la zona, se cumple de manera general con la normatividad para la operación de la mina. Sin embargo, no descartan categóricamente que con esto no se ponga en riesgo la salud de los pobladores. Y es que el temor de los ejidatarios estriba en la contaminación de los mantos acuíferos. Ya nadie toma agua de los pozos ni del río Yaqui, que pasa justo a un costado del asentamiento poblacional.

Minería en la mira de Semarnat

Para Ulises Cristópulos, delegado estatal de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales, hasta el momento, en San Antonio de la Huerta todo volvió a la normalidad. Quedaron solventadas las problemáticas y aclara por qué no procedieron al cierre de la mina.

“La clausura no procedió porque en cuanto a Impacto Ambiental estaba dentro de la norma, que es lo relacionado al manto acuífero y el subsuelo. Pero sí ameritó una sanción porque administrativamente la empresa, no tiene almacenados los productos tóxicos o riesgosos, de acuerdo a la norma”, indicó.

“Ya llegaron a un acuerdo entre las partes, el ejido, municipio, empresa y ya está funcionando (la mina); yo señalé y lo sostengo que seremos muy rigurosos de la aplicación de la Ley a cualquier empresa que esté incumpliendo con la norma, imponiendo las sanciones que corresponda o incluso llegando al cierre de las empresas, porque es un tema que le ocupa a Semarnat el cuidado del medio ambiente y los recursos naturales”.

Cristópulos Ríos, recientemente nombrado delegado de Semarnat, adelanta que por instrucción de la presidencia de la República y del Secretario de Semarnat, en breve realizarán un trabajo de evaluación a las minas que operan en Sonora.

“Nos pidieron puntos particulares, uno es, una inspección y vigilancia detallada y constante a la actividad minera coordinado con Profepa. Hacer diagnóstico general, una radiografía de cómo están estas cien minas que están funcionando en Sonora, si están respetando las normas, de manera periódica Profepa inspecciona estas minas, pero en este caso vamos a hacer un programa especial, para que en un determinado tiempo se dé una revisión a estas minas y obviamente cumplan con la norma, la Ley y de no ser así, procederá la sanción correspondiente”.

Explicó que hasta la última revisión que hizo Profepa, todas las empresas mineras cumplían con la norma, a excepción de la de San Antonio, donde actuaron debido a la denuncia pública que hicieron los ejidatarios.

Para que una empresa esté operando en territorio sonorense debe cumplir con ciertos requisitos, entre ellos destaca: Un estudio de impacto ambiental (basado en un diagnóstico de algún despacho registrado ante Semarnat para estas tareas), cambio de uso de suelo, la inspección y vigilancia constante (cumplir con normas de medio ambiente).

El brillo de la explotación

Actualmente son poco más de cien minas las que explotan el territorio. Alrededor de 40 son consideradas de tamaño mediano y grande. Entre las grandes destaca la de Cananea y Nacozari. Aquí también se incluye La Herradura (la mina más grande de oro en México).

La derrama económica que dejó en 2012 fue de 940 millones de dólares y se estima que para este año pueda ser de 1,200 millones de dólares. Genera cerca de 100 mil empleos.

El 60 por ciento son operadas por empresas de capital mexicano. Los principales propietarios son: Grupo México que dirige Germán Larrea Mota; Grupo Bal, que preside Alberto Baillères González; y Empresas Frisco del empresario Carlos Slim.

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