Protocolos para reabrir tu empresa; experto del CIAD explica los puntos que debes cumplir

El objetivo es establecer la forma en que las empresas puedan garantizar las condiciones que reduzcan o eliminen los riesgos de contagio al personal operativo, clientes y proveedores

Por Gerardo Moreno

Las empresas no esenciales y prácticamente todos los negocios que quieran abrir una vez pasada la etapa fuerte de la pandemia del Covid deberán garantizar la salud de sus trabajadores, para esto científico del Centro de Investigación en Alimentación y Desarrollo (CIAD) crearon los protocolos a seguir antes y durante la reactivación económica.

El doctor Miguel Ángel Martínez Téllez, uno de los encargados de crear el protocolo, aclaró que este fue realizado tras jornadas arduas entre un equipo del CIAD en colaboración con personal de la Universidad de Sonora y el Instituto Tecnológico de Sonora (Itson).

“El protocolo contempla las medidas de prevención según el puesto que está desarrollando de acuerdo al riesgo que tiene cada persona en su lugar de trabajo, puede haber personas que tienen mayor riesgo porque están recibiendo gente del exterior”.  

El documento se llama “Lineamientos para la operación de empresas con actividad no esencial durante la contingencia por COVID 19” y su objetivo es establecer la forma en que las empresas puedan garantizar las condiciones que reduzcan o eliminen los riesgos de contagio al personal operativo, clientes y proveedores.

Para esto, dijo, se tomaron en cuenta todas las recomendaciones de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, la Secretaría de Salud e indicaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS); y aplica para todas las empresas, ya sean grandes industrias o pequeños negocios.

“Los lineamientos descritos son aplicables a todas las personas físicas o morales con actividad económica clasificada como no esencial, tanto de manufactura como de servicio, durante la fase de reapertura y mantenimiento de operaciones, durante la contingencia en el estado”.

Nivel de riesgo

El protocolo toma cuatro niveles áreas esenciales en las empresas: áreas de operación, que es donde los trabajadores realizan sus actividades; áreas no operativas, que incluyen zonas de descanso, comedor, caseta de vigilancia; el área personal que depende de cada individuo; y las operaciones externas a la empresa como transporte, proveedores y servicio de limpieza.

Además, contempla la forma de trasmisión del virus que es de persona a persona, al saludarse, también en aerosol cuando un contagiado habla, y en superficies.

Con esto, el doctor Martínez Téllez explicó que el protocolo se aplica en dos etapas, una está diseñado para aplicarse previa a reabrir e incluye 10 acciones; y otra durante la operación que incluye 25 acciones.

Antes de abrir

Lo primero que tiene que hacer la empresa antes de pensar en abrir es medir el nivel de riesgo que tiene cada empleado según sus labores dentro de la empresa y el nivel del riesgo por cada puesto de trabajo.

Para esto se consideró que “a menor contacto con otras personas, menor es el riesgo del trabajador”. Por eso el mayor riesgo lo tienen los trabajadores en contacto directo con el público como áreas de atención al cliente, recepcionistas y personal en ventanillas. Mientras, hay personal que tienen menor riesgo, como un empleado que esta solo en un almacén.

Por eso cada empresa deberá considerar el nivel de riesgo asociado a la actividad laboral y determinar el nivel de riesgo para cada trabajador. Por eso los expertos del CIAD diseñaron dos instrumentos que sirven para medirlos disponibles dentro del mismo protocolo en el anexo 1 y 2.

Ya teniendo claro eso, antes de comenzar a operar, cada empresa debe seguir estos 10 lineamientos:

Designar una persona responsable y capacitada que supervise la implementación de las medidas. Realizar la autoevaluación de las condiciones de operación actuales y aplicar las acciones necesarias para cumplir con los lineamientos, realizar un procedimiento de desinfección genera y a fondo, designar un área aislada y ruta de salida en aislamiento.

Además, mantener y dar facilidades para que el personal pueda seguir manteniendo la modalidad de trabajo en casa, seleccionar al personal con el que realizará la reapertura del negocio considerando que solo podrá participar quienes no presenten factores de riesgo.

También deberán solicitar que los trabajadores tomen medidas de protección fuera de la empresa; colocar señalamientos en lugares accesibles a la vista para recordar las medidas de higiene y control; contar con los insumos, material sanitario y equipo de protección personal para el personal, como jabón, gel antibacteriano, cubre boca, entre otros.

Lineamientos durante la operación

Ya en operaciones las medidas de control son 25: Primero toda empresa deberá contar con un área de atención médica cuando el número de empleados sea mayor a 100 personas; contar con un programa de detección de SARS-CoV-2; así como implementar un procedimiento para el reporte de empleados con síntomas y un protocolo para atenderlos.

También deberá evitar aglomeraciones mediante el control de acceso, difiriendo horarios de entrada y salida y agendando las entregas de suministros; proporcionar equipo de protección personal a empleados, clientes y proveedores; así como instalar y mantener un programa de mantenimiento de dispositivos de lavado, desinfección de manos y sistema de ventilación con filtro purificador.

Además, deberá establecer las medidas de higiene para el transporte del personal; utilizar contenedores exclusivos para el manejo de pañuelos desechables, cubre bocas y guantes; garantizar el distanciamiento de dos metros entre las personas; propiciar y recordar el lavado y desinfección frecuente de manos, el uso de equipo de protección personal; y evitar el contacto físico entre empleados.

Mantener una buena ventilación en todas las áreas de trabajo, especialmente en zonas cerradas y con presencia continua de personas, de contacto con clientes o proveedores; adecuar el nivel de producción o línea de trabajo para cumplir con el distanciamiento.

Utilizar barreras físicas donde sea posible, para separar personal de clientes o proveedores, en las áreas comunes como el comedor, pasillos y vestidores; limitar reuniones presenciales de trabajo; garantizar que no se use el equipo de protección personal de otra persona; desinfectar las herramientas comunes.

Mantener la limpieza y desinfección de superficies de contacto frecuente como picaportes de puertas, apagadores de luz, dispensadores de agua, teclados o dispositivos electrónicos; evitar laborar con la ropa de calle, para eso debe deben propiciar ropa y zapatos exclusivos para la empresa; y utilizar un tapete sanitario para la desinfección de la suela en la entrada.

Por parte del trabajador, la obligación es informar de manera regular si un familiar, vecino o persona que frecuenta ha sido diagnosticado con Covid19, así como informar si presenta síntoma o malestar, y cumplir en todo momento con estos lineamientos.

“Sabemos que son medidas preventivas que dependen mucho del grado de aplicación y que se le dé seguimiento, tanto por parte de las empresas y de los trabajadores, pero en la medida que las hagamos y exijamos vamos a tener mejores resultados”.

En la creación de estos protocolos participaron del CIAD Lorena Noriega Orozco, Verónica Mata Haro, Irene Iliana Ramírez Bustos, Gastón Torrescano Urrutia, Aarón González Córdova y Miguel Ángel Martínez Téllez. Por parte del ITSON fueron Pablo Gortáres Moroyoqui y Fernando Lares Villa; y Guillermo Eleazar Arteaga MacKinney y Juan Carlos Gálvez Ruiz de la Unison.

Este protocolo ya fue entregado a las autoridades laborales y económicas, y puede ser consultado por las empresas y los trabajadores en la página oficial del CIAD, para que puedan verificar que se aplique.