Condenan en EU a operador de Yarrington

Antonio Peña Argüelles, presunto enlace del ex Gobernador Tomás Yarrington con el narcotráfico, fue condenado este lunes en San Antonio, Texas, a 30 meses de prisión y tres años de libertad supervisada.

Lo anterior, luego que aceptó declararse culpable por un solo cargo de conspiración para lavar dinero. La pena máxima que enfrentaba era de 20 años de cárcel.

Peña Argüelles fue detenido en febrero de 2012, poco después de que su hermano Alfonso fue asesinado por Los Zetas, y desde entonces está preso, por lo que ya cumplió 25 meses de su condena y en breve será puesto en libertad.

Su captura fue la señal más clara de que el Departamento de Justicia trabajaba en una investigación contra Yarrington, quien está prófugo por cargos de lavado de dinero presentados ante la Corte para el Distrito Oeste de Texas en 2012, revelados públicamente hasta principios de 2014.

La acusación de conspiración en la que se basó la condena fue distinta a la presentada en 2012, pues solo abarcó hechos que ocurrieron entre 2004 y 2008, no entre 2000 y 2012 como la original.

Como parte de la sentencia, el Gobierno de Estados Unidos le decomisó tres cuentas bancarias y de inversión con saldo de 4.8 millones de dólares, presuntamente aportados por Los Zetas para sobornar a autoridades de Tamaulipas.

También fueron incautadas una camioneta Range Rover 2011, una Pick up Ford F-150 2011, cuatro inmuebles en Laredo, Texas, y uno más en San Antonio.

En la acusación presentada por la DEA en 2012 se incluyeron declaraciones de cuatro testigos protegidos que detallaron diferentes momentos de la presunta relación del acusado con el priista, quien gobernó Tamaulipas del 1 de enero de 1999 al 31 de diciembre de 2004.

La fuente anónima identificada como CS-1 (por las siglas de Confidential Source 1) dijo que Peña era el conducto entre políticos mexicanos, «en particular Tomás Yarrington y los miembros de los Zetas Miguel Treviño Morales y Heriberto Lazcano».

La DEA obtuvo un directorio del acusado con teléfonos de Yarrington y Miguel Treviño, «El Z 40», líder de Los Zetas.

Otro testigo, identificado como CS-2, declaró que el acusado comenzó a trabajar con el ex Gobernador desde que fue elegido, en 1998.

Este testigo estableció que, desde principios de 2000, recibió grandes cantidades de dinero procedentes del negocio de la droga de parte de Osiel Cárdenas, cabeza del Cártel del Golfo, para influir en el Gobierno de Tamaulipas.

«Esta relación inició con la elección del Gobernador Tomás Yarrington», dice el documento.

El testigo CS-3 aseguró haber visto a Peña con el político en numerosas ocasiones en Nuevo Laredo y Estados Unidos.

Incluso señala que, en 2008, visitó al ex Gobernador varias veces en una casa que rentaba en San Antonio y que en alguna ocasión presenció una discusión entre ambos por dinero.

El testigo confidencial CS-4 aseveró a la DEA que Peña empezó en 2000-2001 a lavar dinero del narco que «Yarrington recibía del Cártel del Golfo» y que coordinaba estas actividades y activos tanto en Estados Unidos como en México para el entonces Gobernador.

La DEA documenta también que, según CS-4, el acusado recibió el 29 de noviembre de 2011 un mensaje de texto en su celular en el que Treviño no sólo lo amenazaba por haberse «robado» 5 millones de dólares provenientes del Cártel, sino que involucraba al ex Mandatario en el asesinato del candidato priista al Gobierno de Tamaulipas Rodolfo Torre Cantú.

REFORMA