Vórtice

El Ejército Cubano de las batas blancas

Según la SRE los especialistas no prestarán “servicios médicos a la población”; ¿Por qué motivo este gobierno de cuarta, le quita las plazas a los médicos nacionales para dárselo a este grupo cuestionable de médicos cubanos?

Por Dr. Jorge Ballesteros

Con el pretexto de la pandemia de coronavirus, López Obrador abre las puertas a los agentes cubanos, que vienen a asesorar a su gobierno de izquierda, para instaurar una dictadura castro-chavista en nuestro país.

Un grupo de médicos cubanos supuestamente especialistas en epidemias, llegó el lunes a México para evaluar la pandemia de Covid-19. Esto lo confirmó el pasado  miércoles,  la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE).

Según la dependencia, los especialistas no prestarán “servicios médicos a la población”. En un comunicado la cancillería explicó que vienen a dar “únicamente recomendaciones en materia de salud pública” para atender la crisis del Covid-19.

En México no requerimos recomendaciones de supuestos médicos cubanos, que en realidad son agentes de inteligencia cubanos, como se ha demostrado sobradamente en todos los países donde han prestado sus servicios.

Tenemos miles de médicos especialistas altamente calificados en México, no hay suficientes empleos para ellos en las instituciones de salud, los datos muestran que la subocupación es de un (9.4%) y la desocupación (7.5%) siendo fenómenos de considerable magnitud, entonces uno se pregunta ¿Por qué motivo este gobierno de cuarta, le quita las plazas a los médicos nacionales para dárselo a este grupo cuestionable de médicos cubanos?

El objetivo es claro, aprovechar la crisis para acelerar la comunización de México, primero son los médicos cubanos, luego vienen los deportistas, los educadores, los asesores militares, etc. hasta lograr el control del gobierno y de los sistemas de  inteligencia militar y policiaca, como pasa en Venezuela.

Algunos países donde perdió el poder la izquierda, se dieron cuenta del peligro de estos programas cubanos, como en el caso de Brasil, donde fueron despedidos estos médicos, por no sujetarse a la evaluación profesional que se les pedía para comprobar sus estudios, ni la aceptación por parte del gobierno cubano de que se les pagara el 100 por ciento de su sueldo, ya que Cuba se quedaba con el 75% del dinero  que les pagaba el gobierno de Brasil.

Había terroristas entre los médicos cubanos”. Han sido claras las palabras del presidente de Brasil Jair Bolsonaro, quien comenzó el año 2020 haciendo fuertes denuncias contra la misión médica cubana “Más Médicos”.

Un programa creado por Dilma Rousseff que llevó médicos cubanos a Brasil entre mediados de 2013 y finales de 2018. “La idea era formar núcleos de guerrilla en Brasil” y, en cambio, Rousseff se prestó para fomentar una dictadura, pues “alrededor de 1 mil millones de dólares se enviaban cada año a Cuba”, afirmó a la prensa local.

En Bolivia donde de 700 supuestos médicos cubanos, solo 205 eran verdaderos médicos. La mayoría de los cubanos del programa de colaboración, sin estudios en medicina, ganaban como un médico profesional, tenía cubiertos viáticos diarios y gastos de viajes al interior del país, entre otras irregularidades, denunció el ministro de Salud en funciones, Dr. Aníbal Cruz, según la nota del diario boliviano “El Deber”.

En Ecuador, tras la salida del dictador Rafael Correa, se les pidió que abandonaran el país a 382 médicos cubanos, que ahora serán reemplazados por especialistas locales. El pasado 12 de noviembre se anunció que el Gobierno ecuatoriano daba por terminados los convenios que mantenía con Cuba.

Carrasco, presidente de la Federación Médica Ecuatoriana, dice que no todos los médicos cubanos que llegaron al país a través de un convenio con el régimen cubano tenían una preparación suficiente o calificada. “No vino el personal más calificado de Cuba ni vinieron a las zonas rurales como se dijo y al final del día no cobraban ellos, sino el Gobierno cubano”.

En el Salvador también se despidieron a los contingentes de cubanos, en la cual no solo han participado médicos y especialistas en oftalmología, sino también enfermeras, anestesistas, licenciados en laboratorio clínico y en servicios farmacéuticos que estuvieron ejerciendo su profesión en ese país,  sin contar con la debida autorización temporal de las juntas de vigilancia de sus profesiones.

Ahora Cuba va sobre Italia, manda un contingente de médicos cubanos y chinos a ese país para combatir al coronavirus. Pero su verdadera intención es iniciar un plan de ideologización comunista, que además le cuesta mucho dinero a Italia. 

En particular, la misión médica cubana, en vez de una misión humanitaria, es un mecanismo eficiente que no solo aporta dinero a la dictadura (porque el régimen cobra entre $4,000 y $6,000 al mes por cada médico), sino que también sirve para inocular el Virus comunista en las capas más pobres y vulnerables de las sociedades.

Los venezolanos saben muy bien cómo funciona: en la época de Hugo Chávez fueron invadidos por más de 40 mil personas (no todos médicos), quienes “tenían una función política, identificaban quién era opositor al gobierno, adoctrinaban a los pacientes y actuaban como agentes de inteligencia para preservar el régimen chavista en Venezuela”, como denunció el embajador del gobierno interino de Venezuela ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Gustavo Tarre Briceño.

Esclavitud y trata de personas es lo que significa la exportación de miles de médicos cubanos egresados al vapor de las universidades, mal preparados, mal pagados, bajo fuerte vigilancia, y con su familia de rehén en la isla de Cuba para evitar que deserten.

A los trabajadores de la salud que operan las misiones médicas no se les permite establecer relaciones personales con la población local ni hablar con periodistas o diplomáticos, y deben solicitar autorización para viajar fuera de su jurisdicción.

Personal de seguridad cubano es el responsable de garantizar el apego a estas medidas. Janoi Gonzáles, un médico cubano exiliado en Estados Unidos desde 2013, señala: “En cada misión hay una persona que se llama ‘jurídico’. Todo mundo sabe que es un agente de seguridad del Estado, que controla todo, que acusa, que tiene derecho a revisar tus documentos privados, tu teléfono, todo”.

Las faltas se castigan con penas que van desde amonestaciones y confiscación de un porcentaje del salario hasta la expulsión de la misión y el retorno inmediato a la isla.

Se estima que la mitad de los médicos cubanos, no menos de 40 000, trabajan en más de 60 países de Asia, África y América Latina. De acuerdo con el Ministro de Comercio de Cuba, la exportación de servicios médicos es la principal fuente de divisas de este país, por arriba del azúcar, el tabaco, el níquel, el turismo y las remesas. Se calcula que estos servicios generan alrededor de 11 500 millones de dólares anuales a la isla.