¿A ti te dan miedo los fariseos?

Por Karla Karina Flores

Una tradición cuaresmal que tenemos en Sonora son los famosos fariseos. A pesar de que para el mundo entero la palabra fariseo remota a los tiempos de Jesucristo, para los sonorenses nos enmarca en algo cultural y visualizamos primeramente a esos personajes que vemos danzar con sus tenábaris, ruidos extraños, y su cara cubierta, causando la sensación de miedo en algunas personas.

Es curioso ver cómo estos hombres cada Semana Santa nos comparten un poco de la cultura de la etnia yaqui, muchos no saben la historia del por qué se visten de “fariseos” durante los 40 días de Cuaresma, lo primero que pensamos es que por pedir limosna para la iglesia cuando en realidad no es así, cada quien tiene un motivo muy personal para hacerlo.

Según la historia, los fariseos nacen al mezclar las tradiciones católicas con las indígenas y como resultado de la evangelización en el siglo XVII. La Semana Santa es para los yaquis una celebración religiosa muy emblemática y respetada dentro de sus tradiciones. Todos estos días tienen significado muy profundo para ellos. Aquí en Hermosillo el señor Manuel Jaquez Rentería es el fiestero mayor y Gobernador de la ramada Revolución.

En una entrevista que pueden ver en el canal de YouTube de Viajando por Sonora, me comentaron que la tradición de los fariseos se puede ver como un juego de ajedrez, o como un ejército, en donde existen rangos, hay mucha disciplina por parte de ellos y respeto a la tradición; ante esto el chapayeca es el que menor rango tiene.

La finalidad del fariseo es distraer a las personas de lo que están haciendo, según los yaquis no se les debe de poner atención a los fariseos sino orar en el momento que ellos pasan frente a nosotros, sin que ellos sean una distracción. Las máscaras de los fariseos simbolizan lo más burdo, grotesco y la hipocresía que llevamos dentro; dichas máscaras tienen significado propio, se distinguen entre reyes, animales o personajes a elección propia. 

Al finalizar estos cuarenta días en donde un fariseo no se baña, come lo que se le brinda, duerme en el suelo fuera de su hogar en las ramadas que se hacen y está sometido a órdenes de sus superiores, se dice que se despoja de todo lo que tienen en su persona tanto interior como exterior en la famosa quema de máscara, en el culmino de la cuaresma el sábado de Gloria.

A pesar de la contingencia sanitaria que estamos viviendo los fariseos yaquis no dejaron sus tradicionales contis aquí en la ciudad de Hermosillo. La palabra “conti” hace referencia a la preparación que re realizó durante los cuarenta días antes de que Jesús llegara a Jerusalén.

Te exhorto a continuar con la recomendación de quedarnos en nuestros hogares,  aunque es muy admirable la decisión de nuestros fariseos yaquis de continuar en sus ramadas en la ciudad y realizando su tradición normal como año tras año, no vayamos este año a sus procesiones y quema de máscaras.

Existen páginas de Facebook en donde podemos ver en vivo esta tradición arraigada, el virus del COVID19 es real y hay países que la están pasando muy mal a raíz de su contagio masivo. Hay que evitar los conglomerados de gente y como te comenté en mi columna anterior tenemos que aprovechar este tiempo en edificación y amando lo esencial, nuestra familia.