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Abrirán Fototeca Universitaria, busca convertirse en baluarte de la memoria

Con un Archivo General del Estado en la ruina, saqueado sistemáticamente, y un patrimonio histórico tangible e intangible en el abandono, irrumpe la Fototeca Universitaria con la intención de convertirse en baluarte de la memoria 

Por Imanol Caneyada

Somos reacios en Sonora a la memoria histórica, sobre todo si esta contraviene la versión oficial de la historia, sostenida durante muchos años por entusiastas voceros que han omitido tantas cosas.

Parece que no hubo en esta tierra una masacre del pueblo yaqui y la esclavización de los sobrevivientes en tierras de Yucatán; parece que nunca expropiaron, persiguieron y expulsaron a los chinos de Sonora ni que hubo un movimiento estudiantil en 1967 ni una matanza en San Ignacio Río Muerto.

El Archivo General del Estado de Sonora naufraga tras cada lluvia y sus documentos se guardan arrumbados en cajas de cartón; ha habido un saqueo sistemático de los mismos sin que nadie pare la sangría.

Otro de los edificios que podría guardar un pedazo de memoria en Sonora, la Biblioteca Central, presenta una ruina parecida al Archivo General.

Nos cuesta entender eso del patrimonio histórico, sea tangible o intangible, y nuestro centro histórico es uno de los más deteriorados del país.

Ni los gobiernos estatales (en plural) ni los municipales (también en plural, sin distinción de partidos), han dedicado un mínimo de presupuesto a restaurar ni rehabilitar aquellos edificios que contienen nuestro pasado.

Y el INAH Sonora se conforma con ser un policía que interviene para evitar mayores catástrofes, olvidado del centro del país porque aquí no existe un pasado prehispánico tan esplendoroso como el de Mesoamérica.

Ante este panorama siempre un poco bárbaro de negar nuestro pasado y empeñarnos en vislumbrar un futuro que nunca llega, la noticia de que Sonora tendrá por fin una fototeca es digna de celebrarse como una de las mejores noticias de los últimos tiempos.

Era un proyecto largamente acariciado que estuvo a punto de consolidarse en la administración de Guillermo Padrés, cuando el ISC estaba bajo la dirección de Poly Coronel.

Por un lado los desacuerdos que hubo entre los impulsores del proyecto (entre otras cosas, por el lugar que acogería la fototeca), y por el otro, el desastroso final de dicha administración, impidieron que el proyecto se concretara.

Un lustro después, la Universidad de Sonora asume una responsabilidad que había eludido por mucho tiempo, y el pasado martes 6 de noviembre firmó un convenio con el Sistema Nacional de Fototecas del INAH para iniciar con los trabajos que darán forma a la Fototeca Universitaria.

Uno de los principales involucrados en esta iniciativa desde hace años, promotor de la conservación de la memoria histórica visual, es el maestro universitario y fotógrafo Joel Montoya.

Él es el que resume en su muro de Facebook cómo es que pudo concretarse este sueño:

“El Colectivo 68-18 ha considerado que la experiencia de conmemorar no debe quedarse en lo efímero. Por ello se ha propuesto rebasar la barrera del tiempo y además de luchar contra el abandono y la indiferencia del poder hacia las memorias colectivas de las tragedias y luchas sociales, ha propuesto a la Universidad de Sonora constituirse como institución garante de la custodia de todo testimonio gráfico, auditivo, escrito y audiovisual que dé cuenta de nuestro pasado. 
“Es un honor invitar a todos ustedes a ser parte de este hecho trascendente y ser testigos de la firma de un convenio con el Sistema Nacional de Fototecas para construir la Fototeca Universitaria. Haremos una mesa de diálogo.
“Está escrita la intención en el Plan de Desarrollo Institucional y hemos trabajado arduamente en ello. Convocamos a todos a sumarse y ser parte de este gran colectivo: ABC y el Movimiento 5 de junio; Río Sonora; Parque de Villa de Seris; Movimiento estudiantil de 1967; las luchas universitarias del STAUS; la lucha del CEUS contra la imposición de la Ley 4 ya están apuntados”.

También dio a conocer que la sede de la Fototeca Universitaria será el edificio conocido como Sociedad Artesanos Hidalgo, una bellísima construcción en el mero centro de Hermosillo; sociedad, por cierto, que fue fundada por José María Arana, el principal ideólogo del movimiento antichino en Sonora.

Además, la Fototeca Universitaria, da a conocer el propio Joel Montoya, “será un laboratorio universitario de producción y estudios de la imagen, dirigido desde las academias y administrado por la Secretaría General Académica”.

Con la tradición de elefantes blancos que tenemos en Sonora, sólo la voluntad institucional universitaria y la contribución de todos los ciudadanos convertirá este proyecto en una realidad que perdure, por eso la convocatoria urgente de los impulsores a involucrarse.

Ahí está el llamado.