“Sin rencores ni odios”: Ernesto Gándara Camou

En esta entrega, el “Borrego” recuerda su paso por la alcaldía de Hermosillo y de sus aspiraciones políticas: “Hay mucha gente que ha simpatizado conmigo, pero hay algunos grupos o cúpulas que no. Eso es evidente. Pero vuelvo a lo mismo. Yo, por eso no genero ni rencores ni odios de nada

Por Feliciano J. Espriella

Con el PRI, sin el PRI o a pesar del PRI, “El Borrego” será el próximo gobernador de Sonora, aseguran su multitud de simpatizantes, amigos, seguidores y una gran cantidad de analistas políticos.

Sin embargo, aunque el 2021 está a la vuelta de la esquina, la realidad es que Ernesto Gándara Camou tiene enfrente una cuesta muy empinada. Si la candidatura de su partido no la tiene fácil, más difícil aun será ganar la constitucional.

Sin embargo, una cosa sí es casi unánimemente aceptada en Sonora: Ernesto Gándara es un aspirante a la gubernatura de los más calificados para ejercer el mandato.

En su currículo encontramos que ha tenido una destacada experiencia en el servicio público que va desde los niveles inferiores hasta las altas esferas de la actividad gubernamental, una muy relevante participación en la política, cuenta con relaciones de primer orden dentro y fuera del país, es ampliamente conocido en el estado y, sin duda alguna, es un hombre de valores, entre los que sobresale su honestidad.

Respetuoso de los tiempos electorales, Ernesto Gándara nos condicionó la entrevista a no abordar el tema del próximo proceso electoral. Platicamos, eso sí, de sus aspiraciones y sus actividades políticas en su estado natal.

Como ya nos lo comentaste anteriormente, tu incursión en actividades relacionadas con la política las iniciaste desde muy joven ¿Cómo surgió en ti ese interés en la actividad política?

Mi papá era Secretario de Gobierno con Faustino Félix Serna, entonces yo tenía 8 o 9 años y me la pasaba arriba de sus piernas, ahí con el gobernador y con mi papá.  Me llamaba mucho la atención lo que veía, la política.

Desde que tengo uso de razón en mi casa oí hablar de servicio público por mi padre, y como para mí siempre ha sido un ejemplo de un buen servidor público, de hombre honesto y congruente, pues yo le vi el lado bueno a la política. Que tiene sus lados que no son tan buenos, desde luego. Pero a mí me tocó eso y eso es lo que trato de seguir, el ejemplo de mi padre. 

Hasta la contienda por la presidencia municipal de Hermosillo, tu participación en la política había sido un tanto cuanto marginal, como miembro del equipo de campaña de otros candidatos ¿Qué te hace ingresar a la actividad ya como protagonista, en vez de seguir como colaborador?

Cuando era secretario de turismo en el sexenio de Eduardo Bours, me surgió la inquietud y el deseo de participar como candidato para algún puesto electoral. Quería buscar una diputación federal, pero alguien me dijo: “Éntrale a la presidencia municipal”, y le entré.

Todo mundo me decía que era una locura. Decían que era imposible ganar Hermosillo y bueno, pues, ganamos bien la elección, no tuvimos ni siquiera problemas post electorales.

Y me dediqué a ser Presidente Municipal.

En ese tiempo me toca participar ya como actor, como precandidato del PRI a la gubernatura de Sonora en febrero-marzo del 2009. No me arrepiento, creo que fue una gran oportunidad. Aprendimos mucho y desde luego es parte de la trayectoria.

Concluí la presidencia municipal y luego estuve tres años fuera, trabajando en actividades particulares pero haciendo mucho trabajo político, recorriendo el estado, cosa que me permitió la oportunidad de ser candidato a Senador, en la cual también ganamos.

Teníamos en el PRI 18 años sin ganar una elección de Senador. Desde 1994 no ganábamos, cuando contendieron Guillermo Hopkins y Armando López Nogales. Tanto Eduardo Bours como Alfonso Elías Serrano fueron senadores de primera mayoría.

Estuve como Senador de la República seis años. Hace tres me invitaron aparte de ser senador, como actividad partidista, a ser el secretario del consejo político nacional. Y pues aquí estoy, como secretario de asuntos internacionales. Mi idea es venirme pronto a Sonora, pero bueno, todavía no me separo del PRI Nacional.

Las presidencias municipales y en especial la de Hermosillo, son muy complejas, difíciles y hasta ingratas. Platícanos de tu experiencia como alcalde de la capital sonorense.

Podría decir que es la actividad más intensa que he desempeñado, porque tenía contacto cotidiano con la ciudadanía, absolutamente todos los días. Para mí fue una gran emoción por el esfuerzo social que representa.

La gente siente muy cercanos a los presidentes municipales, y ellos lo menos que pueden hacer es estar cercanos a la población. A mí me tocó ser un presidente municipal que anduvo mucho en las colonias, en los barrios, con múltiples actividades. La verdad fue una gran oportunidad.

Hubo momentos muy pesados o más amargos también. En la presidencia municipal tuve varios. El tema de seguridad al principio, por ejemplo y que después se complicó.

Hay varias satisfacciones que me han dado el servicio público y la política. Ser Delegado de Semarnat fue una gran oportunidad de conocer prácticamente todo mi estado y los temas ambientales y de recursos naturales. De verdad es un gran aprendizaje, desde el mar, tierra, aire, y fue un proyecto que iniciamos en ese tiempo y del que me siento muy orgulloso de haber participado.

Coordinar el fomento al turismo también fue muy satisfactorio. Me tocó todo el detonante de Puerto Peñasco, de la carretera, de San Carlos, Guaymas, y el turismo rural, desde luego que fuimos al río Sonora y fue una actividad que a mí me llenó de muchas satisfacciones.

Pero la presidencia municipal, por el contacto y cercanía con la gente, fue algo verdaderamente especial. La experiencia fue muy gratificante, formativa y satisfactoria.

En dos ocasiones casi haz logrado la candidatura por la gubernatura. En ambas fuiste de los precandidatos más populares pero algo o alguien se atravesó en el camino y no pudiste llegar o no te dejaron. Muchos de tus seguidores enardecieron ¿Qué nos puedes platicar al respecto?

No es ningún secreto, yo lo he dicho públicamente. Sí, hay mucha gente que ha simpatizado conmigo, pero hay algunos grupos o cúpulas que no. Eso es evidente.

Pero vuelvo a lo mismo. Yo, por eso no genero ni rencores ni odios de nada. Y sí, he tenido oportunidades y sí, naturalmente pues no voy a decir algo diferente de lo que es sabido por otros, pero te puedo decir que todo lo que ha pasado ha servido para bien.

En mi caso personal, en el caso de muchas amistades que he hecho, en el caso curiosamente de amistades con las que en algunos momentos me tocó tener competencia, que ahora son muy buenos amigos y que incluso compartimos una visión con mucha simpatía y con mucha coincidencia. Lo único que no debes permitirte en esto es que te gane el ego, o que te gane el odio y menos que te gane el rencor.

Sí es cierto que hay mucha gente que me decía en las dos ocasiones anteriores que yo tenía mejores números en las encuestas. Pero no necesariamente, en lo personal, creo que las encuestas de un día definan una cosa o la otra. Y yo no me quiero quedar con esa posición de que tendría que ser yo. Ni en las dos ocasiones anteriores ni en alguna aspiración futura.

Yo creo que el trabajo de la actividad pública y política es de todos los días y se gana y se pierde todos los días. Y en ese sentido, yo creo que las experiencias adversas que podemos haber tenido muchos de nosotros, nos deben servir para revertirlas a favor, pero no a favor de una persona ni a favor de un grupo, sino, a favor de una causa.

¿Por qué te gustaría o quieres ser gobernador? y ¿Por qué consideras que podrías ser, llegado el momento, un buen gobernador? 

No puedo hablar a futuro porque sí cuido mucho el lenguaje o los términos de Ley, pero sí puedo hablar de lo que he querido ser. Y en ese sentido he querido ser en dos ocasiones gobernador, 2009 y 2015.

Inclusive en 2009 tuve la oportunidad de ser candidato registrado de mi partido en una contienda interna, en 2015 hubo una candidatura de unidad a la cual yo me sumé, pero desde luego he aspirado a ser. No te puedo decir de aquí para enfrente porque aunque suene a veces un poquito sangrón, hay que respetar la Ley.

Pero sí te puedo decir que he querido ser gobernador porque, primero, tengo el ejemplo de mi padre. Creo que la política es para hacer el bien, creo que en el servicio público se pueden mover muchas cosas y que el poder debe de servir para mejorar la calidad de vida de la gente. Por sí solo, esa posición de querer hacer el bien te da muchas satisfacciones.

He tenido el privilegio de conocer muchos ciudadanos de bien y creo que más allá de un puesto en específico como el de la gubernatura, lo que he aprendido con los años es que no hay ni salvadores de la patria, ni traidores a la patria, ni mucho menos del estado. Hay liderazgos que se van construyendo.

No hay buenos o malos, sino que hay que hacer equipo y reconocer, pero no puedes dejar que un gobernador, o un presidente de la república, o un presidente municipal, sea el único que es culpable, responsable o beneficiario de la historia, de lo que se pueda hacer. Creo mucho en los equipos.

Creo mucho en las instituciones también. Creo que indiscutiblemente el cargo de un gobernador es ejercer un liderazgo de otros liderazgos y desde luego con la gente. Creo, y ahí sí estoy totalmente convencido, de que tienes que hacer cosas para el bien, si no, no vale la pena ser gobernador.

Si el tema es una cuestión individualista o de grupo, yo prefiero otras cosas. Tengo la gran oportunidad de que Dios me ha dado muchas cosas buenas, entre ellas mi familia, mis amigos, y la vida misma.

Si ser gobernador implica generar odios, rencores, venganzas, no me interesaría ser gobernador, nunca. Si el tema de ser gobernador, como cuando lo he querido ser, es crecer, apoyar, dejar desde luego una escuela y un legado para que los que sigan sean mejores, yo creo que vale la pena aspirar a ese cargo. 

Hasta aquí la entrevista. De una cosa me parece que estamos unánimemente convencidos los sonorenses: Ernesto Gándara estará en las boletas para gobernador en el 2021.