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Vórtice | EE.UU. declara terroristas a los cárteles del Narco mexicanos

Tres hechos recientes prendieron las luces de alarma de Estados Unidos y pusieron en el radar al gobierno de López Obrador

Por Dr. Jorge Ballesteros

Donald Trump, el presidente de los EE.UU., le jala de nuevo el mecate a López Obrador para que no se salga del rumbo que repetidamente se le ha dicho que siga, pero que como un anciano díscolo y terco se empeña en torcer.

Esta es la segunda vez que con sus torpes y antipatrióticas políticas, AMLO ha provocado la intervención de los Estados Unidos en México y puesto en peligro  nuestra soberanía nacional.

La primera vez, López Obrador en contubernio con la ONU, auspició la invasión de hordas de migrantes ilegales a México de centroamericanos, de cubanos, haitianos, y africanos principalmente, aunque también ingresaron gentes de Medio Oriente. Un millón de personas que ingresan por nuestra frontera sur.

Trump, nos amenazó con aranceles si no se controlaba esta invasión de migrantes cuyo destino final eran los Estados Unidos, e inmediatamente se mandó al Secretario de Relaciones exteriores, Marcelo Ebrard a Washington el cual se deshizo en reverencias indecorosas y promesas de acatar todo lo que le mandaran.

Esta traición a la patria de López Obrador de propiciar la invasión de extranjeros,  propició que Trump, por fin construyera su ansiado muro en la frontera sur de México, y habilitara a nuestra Guardia Nacional, como su “Border patrol” o patrulla fronteriza, para perseguir migrantes y hacerle el trabajo sucio a Estados Unidos.

México fue convertido en el basurero de América latina,  al ordenar Trump a López Obrador de que convierta a México en “Tercer país seguro”. En virtud de este  acuerdo, EE.UU. envió a México a miles de migrantes —de entrada más de 8,000— bajo el programa “Quédate en México” en el que los solicitantes de asilo deberán permanecer en suelo mexicano hasta que se resuelva su situación.

La siguiente crisis con EE.UU. también la originó López Obrador  por la tolerancia y negativa de combatir a los grupos criminales que trafican con droga, secuestran, extorsionan y asaltan.

El territorio nacional está revuelto por la violencia y el gobierno ni sabe ni quiere poner orden.

Al carecer este gobierno de cuarta, de una estrategia de seguridad seria, ya que las estupideces de López Obrador de “abrazos y no balazos”, lo de “los voy a acusar con su mamá y su abuelita para que los agarren a chanclazos” o lo de que “los narcotraficantes también son persona y no los voy a reprimir” y “fuchi, guácala a la delincuencia” obviamente que los narcos, aparte de retorcerse de risa, respondieron con más violencia y más sangre de inocentes.

Tres hechos recientes prendieron las luces de alarma de Estados Unidos y pusieron en el radar al gobierno de López Obrador, el último fue el error garrafal de los Narcos que se pasaron de listos al asesinar a ciudadanos norteamericanos, entre Sonora y Chihuahua, la familia LeBarón, el día 4 de noviembre, le mataron seis niños y tres mujeres. Los balearon para bajarlos de sus camionetas y luego los quemaron vivos.

El gobierno de MORENA y López Obrador y su maquinara de propaganda, de forma rastrera desataron una campaña de infamias contra esa familia, en lugar de cumplir con su deber de combatir a la delincuencia.

López Obrador vuelve a cometer otro error y se pone de manifiesto su complicidad con el narcotráfico al rescatar de Bolivia y traer a México, dándole asilo al dictador de Bolivia y narcoterrorista Evo Morales, capo de la cocaína, el cual ya figura en la lista de terroristas del FBI.

Evo Morales, violando las leyes de asilo del gobierno mexicano, desde nuestro territorio se dedica a dar órdenes a sus sicarios cocaleros de Bolivia, para que siembren el terror en su tierra como venganza por haberlo destituido de la presidencia tras su fraude electoral. Se le grabó una llamada telefónica donde instruye a un dirigente cocalero a sitiar las ciudades y cortar el suministro de alimentos.

Esto es terrorismo permitido por el gobierno de López Obrador, e intromisión en los asuntos de una nación hermana con la cual se está en paz. ¿Será que el gobierno de México se convertirá en un factor de desestabilización política en contra de otros países de América latina? ¿Suplirá a Cuba en esta labor gracias al pacto que hizo con la creación del grupo Puebla, sucursal del Foro de Sao Paulo?

Otro caso de narcoterrorismo, lo vimos el 17 de octubre, en Culiacán, Sinaloa, con  la derrota del gobierno mexicano ante el crimen organizado, ya después de un fallido operativo en el que se detuvo a uno de los  hijos del Chapo y luego ante la presión de los delincuentes se le soltó.

Los Narcos sitiaron y se apoderaron de la Ciudad de Culiacán, Sinaloa, tomaron como escudo humano a los familiares de los militares y se pasearon por la ciudad con camionetas armadas con metralletas Barrett calibre 50, y a balazos sembraron el terror entre la población y el gobierno federal.

Hasta ahora no se ha detenido al narco que soltaron ni han apresado a ninguno de los que tomaron a tiros la capital de Sinaloa, con muertos y heridos. Al contrario, el Presidente reiteró que no cambiaría su estrategia de abrazos y no balazos.

El fallido operativo contra el hijo del Chapo que acabó en su liberación, y la tragedia de la familia LeBarón, han mostrado la profunda incapacidad del Presidente y su equipo, no sólo para prevenir, sino para enfrentar crisis.

Estos hechos lamentables dejaron ver que este gobierno carece de una estrategia de seguridad pública, no hay voluntad ni capacidad de combatir a la delincuencia común, que se ha apoderado de varias ciudades, menos al crimen organizado o narcotráfico.

Los ciudadanos estamos inermes, ante la inutilidad que ha demostrado la guardia nacional y el Director de Seguridad Pública, Alfonso Durazo, que desde hace tiempo debería de estar de patitas en la calle, pero que el Peje se empeña en defender.

Así pues, no es ninguna sorpresa que EE.UU. vaya a intervenir en México, cuyo gobierno va dando tumbos de un lado para otro, como un barco en el que un incompetente o un ignorante lleva el timón.

Donald Trump anunció que lleva 90 días trabajando para lograr la designación de los cárteles de nuestro país como terroristas, lo que traería graves consecuencias para México y eventualmente sobre su soberanía. Los estadounidenses, podrán venir por los narcos a nuestro territorio, la DEA.

¿Puede intervenir el Ejército de EU en México?

De acuerdo con la Ley Pública 104-132 o Ley Contra el Terrorismo, el presidente puede hacer uso de la fuerza militar para interrumpir, desmantelar y destruir la infraestructura utilizada por una organización formalmente llamada terrorista.

“El presidente debe utilizar todos los medios necesarios, incluida la acción encubierta y la fuerza militar, para interrumpir, desmantelar y destruir la infraestructura internacional utilizada por los terroristas internacionales, incluidas las instalaciones de entrenamiento terrorista en el extranjero y los refugios seguros”, dicta la Ley, promulgada por Bill Clinton en 1996.

Además, EE.UU. podría echar mano de la resolución 1368 del Consejo de Seguridad de la ONU, que hace corresponsables a quienes “hospeden” a organizaciones terroristas. (López Obrador hospedó a Evo Morales, un narcoterrorista).

Si López Obrador hubiera hecho bien su tarea de gobernar a México, nada de esto habría pasado, pero a su improvisación, ignorancia e ineptitud se suma su adhesión al foro de Sao Paulo y a sus planes para comunizar a México, como la política de desestabilizar a nuestro país con la inmigración incontrolada de países de África y Centroamérica, la colaboración con narco-dictaduras como la de Cuba, Venezuela, Nicaragua y Bolivia, y la permisividad a los carteles de la droga  y demás grupos criminales.