Cada vez más mujeres se adentran en la fotografía: Claudia Platt

Para la fotógrafa mexicana Claudia Platt, el arte de capturar imágenes ha evolucionado a lo largo de la historia y ha permitido que las mujeres exploren diversos temas, y tengan un lugar igual al que ocupan los hombres.

En entrevista con Notimex, la artista, miembro del Consejo Sonorense de Fotografía, opinó que el papel de las féminas en esta forma de expresión ha cambiado, a partir de que las primeras artistas de la imagen fija abrieron camino.

“Creo que hay que admirarlas porque tuvieron que enfrentar varios obstáculos, como el hecho de que había que cumplir con compromisos de matrimonio e hijos, y después con el hecho de no ser tomadas muy en serio y de no ser aceptadas en puestos de trabajo”, señaló.

Mientras que en la actualidad, consideró, cada vez son más las que se adentran en la fotografía y en los espacios laborales que no exigen un sexo determinado para ocupar esos puestos.

“Las mujeres ahora son lo que quieren ser, son como quieren, hacen lo que quieren, estudian carreras que antes estaban destinadas solo a hombres”, expuso al añadir: “Siento que las mujeres de este tiempo son felices y realizadas porque no existen límites que no puedan ser eliminados”.

Platt, para quien hombres y mujeres cuentan con las mismas oportunidades de formación, aprendizaje y recursos, expuso que las fotógrafas “suman sus ocupaciones domésticas a las exigencias del arte y en muchos casos hacen de su entorno su motivo artístico”.

En su opinión, en el campo laboral lejos de ver una rivalidad con los hombres, las féminas deben de nutrirse de sus experiencias y conocimientos; “pienso que lo importante es aprender de cada persona con la que convivamos, sea hombre o mujer”.

La artista visual, cuyas primeras imágenes en blanco y negro estuvieron influenciadas por la obra de la italiana Tina Modotti (1896-1942), confesó admirar a las estadounidenses Francesca Woodman (1958-1981) y Hannah Wilke (1940-1993), así como a la francesa Sophie Calle (1953).

Lo mismo que a las contemporáneas Rineke Dijkstra (1959), Gillian Wearing (1963), Ana Casas Broda (1965), Carey Young (1970) y Elina Brotherus (1972), entre otras.

“Acepto que mis artistas visuales favoritas son mujeres, soy muy mujeril, pero creo que tiene que ver con los temas, con la vida, con el hecho de ser mujeres y de sentir y pensar como mujeres”, argumentó.

Identidad, ya sea emocional, maternal, sexual, familiar y social, mencionó, es tema recurrente en las obras de las artistas visuales, una búsqueda en la que se cuestionan “qué somos y cómo estamos paradas ante el mundo”.

“La sociedad manejada por hombres nos ha ´ubicado´ por mucho tiempo, ahora somos nosotras las que buscamos nuestro sitio en el mundo y eso es muy importante para la configuración de nuestra identidad”, subrayó.

Platt, quien ha dedicado parte de su trabajo a explorar la violencia hacia la mujer y su incursión en campos laborales dominados por los hombres, se congratuló de que cada vez sea más frecuente ver a féminas en el arte de capturar imágenes y aconsejó a las jóvenes fotógrafas prepararse.

“Que reflexionen sobre cada cosa que les rodea, que tengan una opinión propia sobre los hechos que ocurren a su alrededor. Ser artista visual no es cosa de suerte, es sumar el talento y la preparación constante.

“El artista contemporáneo es alguien que sabe dónde está parado y que reflexiona diariamente sobre su entorno”, apuntó.

Finalmente, la artista de la lente adelantó que trabaja sobre sí misma inmersa en una familia, proyecto del que saldrán numerosos autorretratos.

Notimex