Dardos

DARDOS | Decisiones y ambiciones   

Por Rigo Gutiérrez 

LOS SOMBREROS y las botas de miles de hermosillenses deberán quedarse guardadas por lo menos por unos meses más, tras el anuncio de los directivos de la Unión Ganadera Regional de Sonora, de posponer para el próximo año la ExpoGan, esto como una medida para preservar la salud de los asistentes y evitar más contagios de Covid.

Sin duda fue una decisión pertinente, pues el semáforo epidemiológico todavía mantiene a Sonora en “naranja” y los contagios siguen reportándose. Y como todo lo que gira alrededor de este virus, nadie tiene respuestas ni certezas, de tal forma que faltando poco más del mes decidieron cancelar.

Don Héctor Platt, líder de los rancheros de Sonora, debió consultar algunas noches con la almohada esta determinación, porque imagine usted todo lo que implica la Expo en materia de derrama económica. Eso sí, lo más trascendente es que un evento de estas características, representaría un mayor riesgo para la salud y echaría por la borda todo lo ganado con estos cinco meses de aislamiento. Por lo tanto es de reconocer esa decisión. Todos los sectores de la sociedad están haciendo un esfuerzo sin precedente para poner en primer lugar la salud de la población…

EL TURNO AHORA para pronunciarse sobre la asistencia del público, es para los directivos de la Liga Mexicana del Pacífico. A mediados de octubre cantarán el “playball” y todavía no se sabe si serán juegos a puerta cerrada.

Ya se maginará la cantidad de dinero que dejará de entrar a la caja registradora de los diez clubes. Estamos hablando de estadios donde pueden llegar a tener capacidad de más de 10 mil aficionados que, además de pagar la entrada, beben, comen, le entran a la quiniela, en fin… una perfecta máquina de hacer “lana”. Por esa razón, al menos en el caso de Hermosillo, para Juan Aguirre, gerente del Club Naranjeros, no será nada fácil tomar una decisión. La moneda está en el aire… y la salud en juego.

TRES MENSAJES deja el zafarrancho protagonizado por Benjamín Hurtado Aguirre, quien se desempeñaba como delegado de la Secretaría de Relaciones Exteriores en Sonora y ya le pidieron la “bola” en la oficina del canciller Marcelo Ebrard.

Uno: los excesos salen caros. El escándalo con policías municipales por fuera de un supermercado, salió de control y escaló hasta costarle su cargo en la SRE.

Dos: reflejo de la clase gobernante. Contrario a lo que pregonaba la “4-T”, es común ver influyentismos, compadrazgos, moches… Y en Palacio no dicen ni pío.

Tres: siempre hay política detrás. Está muy fuerte el choque entre las corrientes Morenistas y así lo dejaron ver, aprovechando el incidente. Ansias de Poder.