El año más violento

Por Gerardo Moreno Valenzuela

Muchos lo sospechamos, pero hasta que te lo confirman con datos claros y cifras oficiales, por fin caes en cuenta y confirmas la magnitud del problema; el 2020 fue el año más violento que se tenga registrado en Sonora, donde en 365 días superamos las mil 500 víctimas de homicidio doloso.

Esta semana el Comité Ciudadano de Seguridad Pública de Sonora emitió un informe, donde confirma que pese a la pandemia del covid19 y los meses de aislamiento social o con su movilidad limitada, hubo más asesinatos violentos desde que se lleva la cuenta.

El 2019 había sido el año más violento que se tenga registro en Sonora, donde se había alcanzado la cifra de mil 356 homicidios dolosos, lo que representaba un incremento de alrededor del 40% en comparación al 2018.

Pues ahora en el 2020 se presentaron, según registros oficiales, mil 584 víctimas de homicidio doloso, es decir, un incremento del 16.7% en comparación al año anterior.

El municipio de Cajeme sigue siendo el más violento de todo Sonora, este 2020 registró un total de 411 homicidios dolosos, lo que representó un incremento del 25.7%, en comparación al 2019.

Luego esta Hermosillo con 224 asesinatos que, aunque disminuyó un 0.8%, presentó escenas de terror como asesinatos de comandantes de la Policía Municipal o la masacre en una fiesta en diciembre en la colonia Misión, casos que siguen impunes.

En tercer lugar, aparece Guaymas con 145 homicidios, lo que representa un incremento del 35.5%. Y por primera vez aparece Caborca en la lista con 127 asesinatos, y es precisamente aquí donde más crecimiento tuvo la violencia con un aumento del 296.9% en comparación al 2019.

Lo más preocupante es que el 63% de los casos fueron cometidos con armas de fuego, lo que nos habla, y así lo confirma el Comité Ciudadano, que están relacionados con actividades ilícitas del crimen organizado.

Aquí se hace evidente que las corporaciones de seguridad están rebasadas, donde las autoridades federales encargadas del tema, que son Sedena, Marina y Guarida Nacional, han quedado a deber; y por otro lado las fuerzas locales, hablando de Policía Estatal, la Fiscalía del Estado y municipales, parecen inexistentes o solo reaccionan.

También resalta el alto grado de impunidad que existe, pues de los delitos más impactantes ocurridos en el estado no hay sentencias, se sabe de algunas detenciones, pero no se ve un avance en las investigaciones.

Por otro lado, no hay trabajo preventivo ni de inteligencia, o no se ve una estrategia clara con objetivos medibles y un plan de trabajo que haga que disminuyan los delitos de alto impacto en Sonora. Sin duda se necesita hacer algo, ahora sí que es un tema de vida o muerte.

Así lo veo yo, cómo la ven ustedes.