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Empresarios señalados por “moches” fiscales de Padrés siguen de proveedores del Gobierno

Fueron señalados por recibir “perdones millonarios” en pagos de impuestos federales y todavía figuran como proveedores aspirando a seguir cobrando por sus servicios

Por Gerardo Moreno

Empresas señaladas en la investigación de la Unidad de Inteligencia Financiera del Servicio de Administración Tributaria (SAT) por haber sido beneficiadas con “moches” fiscales durante la pasada administración de Guillermo Padrés, aún siguen registradas en el padrón de proveedores del Gobierno del Estado, disponibles a prestar sus servicios.

De acuerdo a información consultada por Primera Plana —a través de la página de transparencia de dependencias del gobierno estatal—, se comprobó que al menos cuatro compañías que, a pesar de haber sido investigadas por el SAT y ser exhibidas públicamente en medios nacionales y locales, siguen en la lista de proveedores del Estado hasta enero de este 2017.

Empresas divinas apuestan al olvido

Gerardo Encinas, ex subsecretario de ingresos de Hacienda y ligado a la empresa Singmakers. Figura como proveedor de Sagarhpa.
Gerardo Encinas, ex subsecretario de ingresos de Hacienda y ligado a la empresa Singmakers. Figura como proveedor de Sagarhpa.

Por ejemplo, la empresa Singmakers SA de CV (se dedica a la impresión en general). Este comercio es propiedad de Gerardo Encinas Urquídez, quien se desempeñó como Subsecretario de Ingresos de la Secretaría de Hacienda del Gobierno del Estado de Sonora durante el sexenio de Guillermo Padrés. En estos momentos se encuentra registrada como proveedor y está dada de alta para prestar cualquier servicio a la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Recursos Hidráulicos, Pesca y Acuacultura de Sonora (Sagarpa).

Según la investigación del SAT, tan solo a la empresa ligada al ex subsecretario de Hacienda, se demostró que el gobierno sonorense le había “perdonado” al menos cinco órdenes de cobro de impuestos entre el 2008 y el 2014, con un monto superior a los 29 millones 710 mil pesos.

Otro de los casos es la compañía International Modular SA de CV. Se trata de una empresa dedicada a la renta de aulas, oficinas y dormitorios móviles.

Esta empresa figura en los registros como proveedor de la Secretaría de Educación y Cultura (SEC) a pesar de que en la referida investigación federal, es señalada por haberles perdonado dos cobros de impuestos del SAT.

Roberto Dagnino Acuña, relacionado con la compañía International Modular dedicada a la renta de aulas móviles a la SEC.
Roberto Dagnino Acuña, relacionado con la compañía International Modular dedicada a la renta de aulas móviles a la SEC.

Así la cosas, en el 2011 hay registros de que el gobierno de Padrés le dejó pasar un cobro por más de siete millones de pesos y en el 2012, no pagó impuestos por cinco millones 658 mil pesos.

International Modular es una empresa que tiene varios accionistas, pero uno de ellos es Verónica Alma Quijano Cano quien es esposa de Roberto Dagnino Acuña (cuñado del exgobernador de Sonora).

Por si fuera poco, esta misma empresa se vio beneficiada por la venta de un terreno de más de nueve mil metros cuadrados en el Vado del Río el 13 de diciembre del 2011, los cuales se ha denunciado que fueron vendidos de manera ilegal por el entonces Ayuntamiento de Hermosillo y están en proceso de recuperación.

Otra empresa involucrada en la investigación por los moches fiscales, es Corral Confort en Clima SA de CV. También se mantiene como proveedor de la SEC.

Es una compañía propiedad de Ramón Corral Ávila que se dedica a la venta de aires acondicionados. En el 2008 debía pagar tres millones 724 mil pesos en impuestos, pero al final solo pagó poco más de nueve mil, es decir que se le perdonó alrededor de tres millones 714 mil pesos.

Ramón Corral involucrado en la investigación por los moches fiscales con su empresa de aires acondicionados.
Ramón Corral involucrado en la investigación por los moches fiscales con su empresa de aires acondicionados.

La última empresa que está debidamente registrada y aprobada para prestar cualquier servicio al Gobierno del Estado, en este caso a través de la Secretaría General de la Contraloría Estatal, es el centro de convenciones Expo Forum SA de CV, el cual es propiedad del empresario Mario Humberto Aguirre Ibarra, quien además está señalado como uno de los principales cómplices del fraude alrededor del programa de Uniformes Escolares Gratuitos.

Según el expediente del SAT, a Expo Forum se le perdonaron al menos tres cobros de impuestos federales en el 2010, 2011 y 2012, todo por un monto total de 19 millones 678 mil 877 pesos.

La lista puede ser más larga

Este recuento que hace Primera Plana es de apenas de la lista de 41 empresas que se filtró a un medio de comunicación nacional en el 2015. Sin embargo, la unidad de inteligencia financiera del SAT ya dio a conocer que la investigación que realizaron dio como resultado a un total de 574 contribuyentes que se vieron beneficiados con “auditorías a modo” durante el sexenio Padresista donde se calcula un fraude al fisco de alrededor de mil 700 millones de pesos.

Mario Aguirre, propietario de Expo Forum, a quienes “perdonaron” impuestos del SAT. Aún figura como proveedor.
Mario Aguirre, propietario de Expo Forum, a quienes “perdonaron” impuestos del SAT. Aún figura como proveedor.

Lo anterior incluso sirvió para que el pasado 31 de enero el Juez Federal del Décimo de Distrito con sede en Sonora dictará sentencia como culpable a Francisco Roberto Ávila Quiroga, quien era el director de Auditorías Fiscales de la Secretaría de Hacienda estatal durante el gobierno de Padrés Elías, aunque solo se le impuso una sentencia de seis meses de prisión y una multa de 30 días de salario mínimo.

Sin embargo, esta muestra deja entrever que cientos de empresarios cómplices de los fraudes que se realizaron durante la anterior administración en contra del erario, aun podrían verse beneficiados con contratos para proveer los diferentes productos, servicios o incluso ganar licitaciones en las diferentes dependencias de la actual administración y así seguir recibiendo recursos públicos, como si nada hubiera pasado.