Justicia con equidad, para quien pueda pagarla

Por JJ. Atondo

No conozco a fondo el caso de la dama que violó la ley, al sustraer recursos públicos de las arcas de la agencia fiscal. No sé cuánto sea la cantidad que sustrajo, pero sí sé que cometió un delito y debe pagar por ello.

Tampoco sé el rango que tuviera esta dama en la Secretaría de Finanzas, pero debe ser uno menor, pues de ser mayor, el escándalo hubiera sido de la misma proporción.

Bueno, si es que, si este fuera el caso de que se hubiera permitido el escándalo. En otras palabras, de que sí fuera un funcionario de alto rango.

Hace ya muchos años, saliendo de “El Heraldo de México”, allá en la colonia Doctores del DF, perdón, CDMX… ¡Por Dios¡ Esta gente…

¡Hasta las succiones están centralizando!

A mí, qué me den dos explicaciones al respecto.

Bueno, el caso es que al salir de “El Heraldo”, paso por un auditorio, donde se anunciaba conferencia del emérito Constitucionalista Ignacio Burgoa Orihuela. El tema era “Equijusticia”, la cual definió como Justicia con Equidad.

En términos general hacía referencia a que en muchas ocasiones no se mostraba compasión ante los atenuantes que pudieran existir en la comisión de un delito.

Puso como ejemplo el caso de dos hombres que entraban a un super y ambos se robaban una lata de atún. El primero de ellos, era una persona de clase media, con trabajo seguro y redituado. Todo lo contrario del segundo, que estaba desempleado y tenía hambre.

El delito era el mismo, por tanto, la pena tendría que ser la misma, pero, dijo en aquella ocasión el Maestro Burgoa, de aplicarse la equi justicia, es decir la justicia con equidad, el Juez tendría que tomar en cuenta que el primero robó por diversión, mientras que el segundo, simple y sencillamente cometió el delito por hambre, por necesidad.

Todos sabemos, hasta quienes no estudiamos Derecho, ni ninguna otra carrera, que uno de los problemas de las leyes en México no están reglamentadas y de allí que regularmente las demandas no se dirimen en la primera instancia, sino que siguen hasta la segunda y tercera y en muchas ocasiones en el máximo Tribunal de Justicia en la nación.

Los verdaderos delincuentes regularmente son quienes tienen dinero para evadir la justicia con estrategias como los amparos y también con mucha regularidad sus abogados encuentran la mejor de las interpretaciones legales para lograr la exoneración de su delincuencial cliente.

No soy abogado, ni lo seré nunca, porque para poder alcanzar el título, no solo se exige carrera profesional terminada, sino también preparatoria y segundaria.

Y en este sentido, yo solo tengo el mejor de los sentidos, el sentido común.

Por ejemplo, exhibo mi supina ignorancia en el caso del ex gobernador Guillermo Padrés. No sé si sea culpable o inocente de los delitos de los que se le acusó y por el cual fue encarcelado en un centro penitenciario de máxima seguridad allá en la CDMX, en noviembre de 2016 y salió el 3 de febrero de este año, para seguir enfrentando el proceso en libertad, tras el pago de una fianza de 40 millones de pesos, que inicialmente eran por arriba de los 100 millones y que finalmente quedó en 15.

Un año y tres meses, que equivalen a 450 días y estos a 10 mil 800 horas.

Desde antes de su detención, el ex gobernador contrató los servicios del abogado de militancia panista, Antonio Lozano Gracia, de quien es sabido que tiene un alto nivel en su profesión por lo que solo acepta defender casos de extrema polémica y fuertes ingresos y entre sus socios está Diego Fernández de Cevallos.

Bueno, el ex Procurador de Justicia de la Nación, PGR, cargo que le fue conferido por entonces Presidente, de filiación ¿priista? Ernesto Zedillo, cobra y muy bien por sus servicios. Se sabe que cobra por horas de servicios prestados, incluso desde antes de empezar el proceso.

No sé sí estoy muy bajo o alto, pero quiero suponer que a Padrés le cobra 5 mil pesos por hora y sí estuvo 10 mil 800 horas en prisión, si mis cálculos, que todavía datan de la entonces aritmética, no fallan, el Licenciado Padrés Elías, por ese tiempo debió pagarle ¡54 millones de pesos!

Y hay que recordar que el proceso continúa, y, por tanto, don Toño Lozano que no tiene la gracia de trabajar di oquis, pues ahora, hasta este momento, debe tener una cuenta adicional de 9 meses, que son 270 días que multiplicados por 24, dan 6 mil 480 horas, pues don Memo ya debe 32 millones 400 mil pesos

En total, por lo pronto, Don Toño ya se ha embolsado 86 millones, 400 mil pesos.

Han ustedes de perdonar si estoy mal en mis números. No terminé la secundaria y por si fuera poco, no tengo ni la menor idea si Don Toño, que por cierto tuvo a su cargo el asesinato del Cardenal Posadas, cobra menos o arriba de 5 mil pesos la hora.

A propósito ¿alguien sabe si se resolvió el crimen del Cardenal Posadas?

Bueno, el caso es que Don Memo ha tenido los recursos para defenderse, como también los han tenido Carlos Villalobos Organista, que en el cerro que se ubica por arriba de la Cuarta Zona Militar, tiene una residencia como aquella de Los Montañeses, de la que aún la mula no puede entender cómo es que su dueño sea Pedro.

Y no solo en el PAN, también en el PRI hay delincuentes que han saqueado a este país y que no solo se burlan de las leyes y de los mexicanos, apareciendo en revistas top models del mundo, exhibiéndose con sus amoríos, como en su caso lo hizo el finado Raúl Salinas de Gortari.

Claro, me refiero a Enrique Peña Nieto, a quien parece que el Presidente López Obrador, solo atacará con abrazos

Mientras, la empleada que sustrajo dinero en Tesorería, pues muy seguramente será juzgada con todo el peso de la inequitativa Ley mexicana. La que el Maestro Burgoa Orihuela criticó reclamando una equi-justicia.

Como exclamaría en su momento, el popular líder cooperativista, Don Florencio López Tapia: ¡Tan clarooo!