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Reinventarse y sobrevivir: la contingencia los obligó a buscar opciones

Desde que comenzó la contingencia José Humberto Briseño, comenzó con entregas a domicilio en su chevy blanco, para ir hasta donde los clientes.

Por Gerardo Moreno

Todo comenzó en 1920, cuando la señora Beatriz Quiwis Molina decidió poner un puesto de frutas y verduras en el Mercado Municipal de Hermosillo, hoy 100 años después “Frutería Briceño Hermanos” sigue operado. Pero por el Covid-19 tuvieron que modificar la venta y hacerla de manera digital y a domicilio, eso les ha permitido sobrevivir.

Entrevistamos al Señor José Humberto Briseño Gálvez, encargado de la Frutería, sobre la calle Américas; justo a espaldas de su chevy blanco, luego de acompañarlo a realizar un par de entregas que le encargaron ese domingo.

Viste una camiseta negra mangas largas en cuyo pecho luce orgulloso el estampado de Frutería Briceño junto a la leyenda “desde 1920”, dejando claro que son una empresa centenaria.

“El negocio de mis padres, lo trabajan mis papás, nos dedicamos a la venta de frutas y verduras. Entonces nos reinventamos un poco, adecuándonos a la contingencia actual del Covid-19”, dijo orgulloso.

Platicó que el negocio lo empezó su bisabuela quien pensó que podía acercar las frutas y verduras de las centrales de abastos al mercado y así facilitar a las personas comprarlas. Comenzó en uno del pasillo y luego se instaló el puesto formal.

Desde entonces el negocio es operado totalmente en familia, por él ya pasaron cuatro generaciones, hasta caer en manos de José Humberto quien la maneja junto a sus tres hijos, su nuera y su esposa.

La Frutería Briceño es un negocio con 100 años de tradición en el mercado.

“Ahí estamos mira, a ratos días buenos, días malos, días bien. Estamos al pie del cañón… Es un negocio 100% familiar desde 1920, entonces trabajamos mi familia, terminamos nuestra labor y nos metemos a nuestra casa, en ese sentido tenemos total control en el personal que trabaja en la frutería porque es mi familia”, comentó.

Antes de la Pandemia del Covid19, todos los días José Humberto acudía a las cinco de la mañana a la Central de Abastos por las frutas y verduras que luego vendía en su local.

Ahora solo levantan los pedidos por teléfono, arman los paquetes en la bodega de la familia y luego él personalmente los distribuye a bordo de su Chevy blanco, donde incluso ya agregaron productos de abarrotes y material de limpieza.

“El contacto es por medio del teléfono, al Whatsaap 6622-78-00-57, hace su pedido, se le cotiza y se le manda la lista de precios, actualmente ya manejamos lo que es abarrotes, carnes, pollo y mariscos, además de la fruta y la verdura”, dijo.

A pesar de la crisis y gracias al apoyo de la sociedad el trabajo de no ha parado, incluso les han llamado personas de Estados Unidos para hacerles llegar el alimento a sus familiares de Hermosillo.

“Se ponen en contacto con nosotros personas de Tucson o de Phoenix, y le hacen llegar a sus familiares aquí. Nomás nosotros somos el medio para lograr que le llegue a sus familiares con la seguridad de que todo les va llegar con la confianza”, comentó.

Frutería Briseño también ha servido como el puente entre quienes quieren ayudar y las personas necesitadas, ya que los han contratado para hacer llegar despensas y alimentos a familias que ya no tenían qué comer.

“Hay que aportar un granito de arena, cada desde su trinchera ojala que la sociedad se uniera entre ellos mismos. Es muy sencillo, júntense entre dos o tres y entreguen despensas donde ustedes quieran, es bastante la necesidad que ahorita en Hermosillo”, platicó.

Incluso ese domingo que lo acompañamos una mujer de Arizona le hizo llegar una despensa a una parienta que se hace cargo sola de una hija con discapacidad y otra entrega a un hombre que vivía de hacer mandados en el mercado pero que se quedó sin trabajo, él se hacer cargo de tres hijos y ya no tenían alimento para sobrevivir otro día.

José Humberto Briseño aclaró que la idea ahora es mantener este negocio familiar que ha sobrevivido 100 años pasando varias adversidades, y el Coronavirus no será la excepción.

“Ya tenemos 100 años y pues me tocó a mí estar en esta contingencia y vamos a trabajar, vamos a trabajar duro, vamos a salir adelante. Siempre hemos sido una nación que se echada para adelante, México, yo estoy seguro que todos vamos a salir adelante”, aseguró.