Suicidio de Sergio Alonso, foco rojo para Sonora y todo México

El suicidio de Sergio Alonso, alumno de la Secundaria Num. 11 de Hermosillo, representa una alarma que las autoridades del Estado y de todo el País deben atender de manera urgente y no considerarlo como “un hecho más”, así mismo debe ser atendido este tema por los mandos escolares, que vemos con preocupación en este caso que señalan, sin preocupación alguna, que el bullying “siempre ha existido” y hacen caso omiso a las situaciones de violencia que se presentan entre las y los alumnos, señaló la diputada federal, Lorenia Valles.

La diputada perredista calificó como muy lamentable que el menor se haya quitado la vida, luego de que, según información de algunos medios de esta ciudad, desde febrero era víctima de burlas por parte de sus compañeros de escuela.
Dijo que es muy preocupante que el Director de la Escuela “Rafael Huerta Sandoval”, Eduardo Verdugo Ramírez, haya aceptado el hecho de que Sergio Alonso sufría de violencia por parte de sus compañeros, que le ponían apodos y que haya afirmado que el llevarse pesado, no significa que se trate de bullying, es desconcertante que no se haya hecho nada para evitarlo.

La diputada sonorense consideró que este caso debe representar una alarma para todas las autoridades escolares, tanto para la Secretaría de Educación Pública y de Salud, a nivel local como federal, así como para los gobiernos de los distintos niveles, para actuar de manera inmediata sobre este asunto.

Recordó que el pasado 7 de agosto presentó ante la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, un Punto de Acuerdo que fue aprobado para legislar en materia de violencia escolar y que se establecieran o en su caso, se reforzaran las medidas y acciones necesarias para prevenir la violencia y el acoso escolar.

Valles Sampedro apuntó que en ese entonces, sucedió un caso de violencia en la Primaria José María Morelos en Hermosillo contra una niña jalisciense, y sin embargo hasta el momento, no se ha hecho nada, a pesar de que este Punto de Acuerdo se giró de manera oficial a todas las secretarías de educación estatales y oficinas escolares del país.

Dijo que sólo entidades como el Distrito Federal, Nayarit y Puebla, regulan en diferentes marcos legislativos, el acoso escolar, promueve la convivencia libre de violencia en las escuelas y la seguridad integral escolar y que en las entidades donde no se ha legislado el tema, las leyes lo atienden de manera muy general.

Finalmente se refirió al estudio “El bullying o acoso escolar” realizado por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), donde se señala que 11 por ciento de los estudiantes mexicanos de primaria han robado o amenazado a algún compañero.

A nivel de secundaria llega a poco más de siete por ciento que contrasta con el 40.24 por ciento de estudiantes de sexto grado de primaria que declararon haber sido víctimas de robo en su escuela.

“Los porcentajes de escolares que han sido insultados o amenazados en centros educativos asciende a 25.35 por ciento; el de golpeados, 16.72 por ciento, y de quienes han vivido algún episodio de violencia, 44.47 por ciento.

El estudio precisa que la edad más frecuente en la que se presentan actitudes violentas de los niños, según las estadísticas, es entre los siete y 14 años; “hay conductas que aparecen en niños más pequeños, pero son difíciles de medir por falta de métodos específicos”.

La realidad nos obliga a atender la imperiosa necesidad del diseño de una política pública integral para combatir el flagelo de la violencia que cada día afecta más a nuestra niñez y juventud, finalizó.