Así lo veo | Seguimos sin comisión de búsqueda de personas

Por Gerardo Moreno

El hecho fue de verdadero terror, un grupo de madres que buscan desesperadamente a sus hijos desaparecidos encontraron 42 cuerpos en el desierto de Puerto Peñasco, haciendo más evidente que mientras el problema de las personas desaparecidas en Sonora se vuelve más grande a las autoridades parece no importarles y avanzan a paso de tortuga.

Para entrar en contexto. El capítulo vivido del 23 al 26 de octubre en Peñasco parecía sacado de los oscuro de una serie de terror, integrantes del colectivo Madres Buscadoras de Sonora, primero localizaron cinco fosas con cuatro cuerpos enterrados, algunos calcinados, al siguiente día en el mismo lugar se localizaron nueve cuerpos más para dar un total de 13.

Al siguiente día se localizan 14 fosas clandestinas más y el sábado 26 otras 15 fosas. Dando un total de 40 osamentas y dos cuerpos enteros.

No son los primeros, el colectivo la Guerreras Buscadoras de Sonora también tiene encontrados más de 50 cuerpos en fosas clandestinas a lo largo y ancho de todo el estado durante el 2018 y 2019.

En Sonora esta situación realmente es preocupante. En el último informe nacional (el 13 de mayo) se habían localizado más de 200 fosas clandestinas en el 2018 con un total de 337 cuerpos, de las cuales 72 fueron en Sonora, estando en tercer lugar nacional. Sin duda este dato debe haber crecido por no hay actualización.

Según el Registro Nacional de Personas Extraviadas o Desaparecidas del Fuero Común, al corte del 30 de abril del 2018 (último dato disponible) en Sonora había un total de 2,150 personas desaparecidas. Pero la misma Fiscal General, Claudia Indira Contreras, ha declarado que este registro no es confiable y se trabaja en nueva base de datos, pero a la fecha no se ha dado a conocer.

Por otro lado, fue hasta el cinco de septiembre que el Congreso del Estado aprobó la “Ley que Crea La Comisión Estatal de Búsqueda de Personas”, la cual deberá estar integrada, operando y con presupuesto para el primero de enero.

El problema es que dicha Ley se publicó en el Boletín Oficial del Estado (BOE) hasta el 25 de septiembre, 20 días después. Y aunque el artículo segundo transitorio obliga a la Secretaría de Gobierno a publicar la convocatoria días después de su publicación, ya pasaron más de 40 días y aún no se tiene lista.

Mientras la autoridad no toma en serio a las personas desaparecidas, las Madres y Guerreras buscadoras siguen encontrando más fosas con cuerpos que deben tener un nombre y apellido. Creo que por paz de estas familias el tema debe ser tomado con seriedad, pero también por la paz de todo Sonora, porque noticias así solo generan más dudas sobre dónde habrá más fosas y temores porque aquí se puede matar y enterrar a personas sin mayores consecuencias.

Así lo veo yo, como lo ven ustedes.