DARDOS | Restricción, amarga medicina contra Covid

Por Gabriel Rigo Gutiérrez E.

Donde parece que ya no hay más ingenio ni creatividad es en el Cabildo de Hermosillo. Hasta el último reporte, los 21 regidores continuaban recibiendo su cheque de 30 mil pesos mensuales cada uno, por supuestamente representar a los ciudadanos. La situación es que después de estos tres meses de pandemia, lo único que se les ocurrió fue limitar la circulación de automóviles de las 18 horas a seis de la mañana y quien no tenga un “salvoconducto” (en ese horario), la policía lo multará.

La medida restrictiva fue votada por mayoría en el Cabildo, que lo integran 21 regidores, el Síndico Fermín González y la alcaldesa Célida López. Y para darse una idea del trabajo de los ediles, este año han sesionado solo ocho ocasiones.

Ojo: estamos de acuerdo con que bajar la movilidad reduce los contagios pero ¿qué pasará después de las seis de la tarde, en una o dos semanas… a poco usted cree que el virus se va ir? Desde luego es insuficiente.

Vea el caso de China, país donde nació la pandemia, Pekín reportó un “rebrote” tras bajar los casos positivos. No hay vuelta de hoja, el virus llegó para quedarse, el reto es ver cómo convivir pese a su existencia.

Más allá de “salvoconductos” e inyectar pánico, lo trascendental será que las autoridades tomen aire y escuchen a expertos del CIAD, que inviten a la comunidad científica, que involucren a la Sociedad Civil Organizada.

Esta semana se vaciaron las calles no por el virus, sino por el miedo de los conductores a pagar una multa de 1,700 pesos o en el peor de los casos a ser “mordido” por un agente. Y hay que ser claros, la situación económica del hermosillense es de incertidumbre.

El verdadero reto radica en crear una nueva cultura de higiene, alimentación, convivencia, mejorar el Sistema de Salud, olvidarse de las obras de relumbrón, y eso no se resuelve con multas ni paralizando ciudades. Llevará tiempo y compromiso social, por esto último es importante que tomen en cuenta a la sociedad.

De lo legal de estas medidas ni hablamos, los regidores hermosillenses mejor guardaron silencio —salvo el regidor Luis Mario Herrera Padrés que al final solo se abstuvo—. Organismos como la Barra Sonorense de Abogados consideraron estas medidas como violatorias al artículo 11 de la Constitución, referente al libre tránsito. Y es precisamente el riesgo que corre el gobernante en estas crisis, tomar decisiones o quedarse de brazos cruzados… pero cuidado con recetar muy seguido la fórmula el miedo a costa de libertades, porque termina por convertirse en hartazgo social.