Destacada

Agencia Especializada en Delitos de Querella: experta en corrupción  

Trinidad Cázarez, secretario de acuerdos de esta agencia del MP, acostumbra a pedir dinero a cambio de darle celeridad a las investigaciones, según denuncia ciudadana

Por Imanol Caneyada

“No tengo tiempo, tengo demasiado trabajo”, ha sido la reiterada respuesta que el ciudadano Arturo Valdez González, originario de Cananea, ha recibido de Trinidad Cazarez Montoya, secretario auxiliar de acuerdos de la Agencia Primera del Ministerio Público Especializada en Delitos de Querella, con sede en Hermosillo.

Además, este funcionario le ha pedido dinero en sucesivas ocasiones a efectos de que avanzara la investigación, la última vez, mil quinientos pesos a cambio de que le entregara el auto de su propiedad, causa de la querella que ha obligado a Arturo Valdez a tener que vérselas con una justicia lenta, dilatoria y corrupta.

No es la primera vez que el secretario auxiliar Trinidad Cazarez Montoya es señalado por prácticas de dilación, corrupción y otra serie de irregularidades.

En este caso en concreto, el pasado 26 de enero la víctima interpuso formal queja ante la Visitaduría General de la PGJE en contra de la Primera Agencia del Ministerio Público Especializada en Delitos de Querella por dilación, especialmente contra Cazarez Montoya, quien además de no realizar ninguna diligencia respecto de la denuncia que en junio de 2016 puso Valdez González por fraude, le ha pedido en repetidas ocasiones dinero y se quedó con diferentes aditamentos del vehículo en cuestión antes de que le fuera entregado a su propietario.

Los hechos, según el testimonio de la víctima y los documentos que obran en su poder, se dieron de la siguiente manera.

En diciembre de 2015, Arturo Valdez interpuso una denuncia ante la Agencia Mixta del Ministerio Público de Cananea por el delito de fraude.

El motivo: la venta de una camioneta Toyota Tundra de su propiedad a un par de sujetos, los cuales le pagaron con dos cheques sin fondos equivalentes a dieciséis mil dólares.

Medio año después, en junio de 2016, Arturo Valdez circulaba por la ciudad de Hermosillo, a la altura de la avenida Reforma y Aguascalientes, cuando detectó el Toyota Tundra de su propiedad.

Llamó a la policía municipal, y al lugar acudieron los agentes Pedro Martínez Acuña y Víctor Manuel Ruiz Arvizu, elementos comisionados al Departamento de Vehículos Robados.

En su informe, los policías confirman la versión del legítimo propietario del vehículo, el cual, en efecto, tenía reporte por el delito de fraude, por lo que procedieron a detener el vehículo y ponerlo a disposición del agente de la PEI encargado del Departamento de Vehículos Robados Tomás Efraín Jiménez Ruiz.

7 Hoja 2En este mismo informe, los policías asientan que la persona que manejaba el Toyota Tundra, de nombre Jesús Alberto Camacho Meza, les informó que él, a su vez, compró el vehículo en un negocio de empeño de autos llamado “Servicash”, ubicado en el Bulevar Solidaridad y calle Ahome; la persona que le vendió la camioneta responde al nombre de Emily.

El vehículo fue asegurado y se abrió el expediente penal número C.I.-16/16 por el delito de fraude y lo que resulte.

A pesar de que la Agencia del Ministerio Público cuenta con suficiente información para investigar al negocio de empeño de autos “Servichash” y dar con las personas que cometieron fraude en contra de Arturo Valdez, éste asegura que en siete meses no ha habido ni un avance en la investigación.

Las veces que ha acudido a la Agencia del Ministerio Público para saber el curso de la investigación, el secretario auxiliar Trinidad Cazarez le ha respondido que tiene mucho trabajo y que no hay ningún avance.

????????????????????????????????????

Además, al menos en tres ocasiones le ha pedido dinero el funcionario, alegando que tiene muchos gastos y no le alcanza; han sido montos de tres mil pesos que Arturo Valdez se ha negado a darle.

La última vez fue en noviembre del año pasado, cuando le notificaron que podía recoger el vehículo, ya que el denunciante había comprobado ser de su propiedad.

Cuenta Arturo Valdez que se encontró la camioneta con todas las puertas abiertas y al funcionario Cazarez Montoya esperándolo para proceder a la entrega del vehículo. A cambio de ello, el secretario auxiliar le pidió mil quinientos pesos.

Arturo Valdez se negó a darle el dinero que solicitaba y le exigió el vehículo. Después de un rato de forcejeo, el funcionario accedió a entregárselo.

Posteriormente, el propietario del vehículo descubrió que le faltaban varios objetos como el forro del volante y el gato hidráulico.

A causa de la actitud de Trinidad Cazarez y los nulos avances en la investigación después de ocho meses, Arturo Valdez resolvió acudir el pasado enero ante la Visitaduría General de la Procuraduría General de Justicia del Estado para interponer una queja formal contra la Agencia Primera del Ministerio Público Especializada en Delitos de Querella.

La diligencia se efectuó ante Myrna Rocío Robles Apodaca, agente del Ministerio Público Visitador, quien está encargada de darle seguimiento a la queja.

En los ámbitos de la PGJE ha trascendido que Trinidad Cazarez tiene por costumbre aprovecharse de su cargo y solicitar dinero a las víctimas de algún delito a cambio de darle celeridad a las investigaciones.