Desorden e inseguridad en guarderías operadas por el IMSS

Por Lourdes Encinas Moreno

Las guarderías que el IMSS opera de manera directa, es decir, que no se subrogan a particulares, son las que han presentado peor desempeño en los últimos años, como se reporta en el apartado “5.6 Guarderías de Prestación Directa”, de la Memoria Documental “Guarderías del IMSS”.

Incumplimiento en las normas de protección civil, personal sin la calificación necesaria, aumento en número de quejas, asignación presupuestal discrecional en las delegaciones de los estados y una inscripción de apenas el 71%, son los principales resultados de la Verificación de la Prestación de Servicios para la Atención, Cuidado y Desarrollo Integral Infantil (guarderías), realizado entre octubre y diciembre de 2016, por el Órgano de Control Interno del IMSS, citado en la memoria documental.

Asimismo, se reportó que la mayor parte del personal no estaba suficientemente calificado para prestar el servicio, debido a bajo nivel educativo y falta de capacitación, lo que incrementó el número de quejas relacionadas con maltrato, descuido y negligencia, llegando a 117 en 2016, y una negativa a colocar cámaras de vigilancia.

Esto se atribuyó a una oposición por parte del Sindicato Nacional de Trabajadores del Seguro Social (SNTSS) para adoptar los procedimientos de guarderías, ya que no se les tomó en cuenta en su diseño, “lo cual dificultaba su aceptación y difusión”.

A esta verificación, se sumó otra realizada entre enero y diciembre de 2016, y el mismo período de 2017, por el IMSS, bajo la metodología Doing Business del Banco Mundial, que ubicó al 85% de las guarderías de prestación directa por debajo del lugar 1,000.

Al 30 de septiembre de 2018, había 142 guarderías de prestación directa, con 29 mil 623 lugares disponibles, que representan el 10% del total de guarderías. A la misma fecha, 12 de estas guarderías estaban suspendidas por situaciones de protección civil.

Aun con estas deficiencias, las guarderías de prestación directa mostraban un alto nivel de aceptación entre los usuarios, con un 96% contra el 98% de las guarderías subrogadas a particulares.

Sindicato pide supervisión a modo

Todas estas fallas persistieron, al menos hasta 2018. El 14 de agosto de ese año, se difundió un oficio con el acuerdo alcanzado entre el IMSS y el SNTSS para, entre otras cosas, instalar cámaras de circuito cerrado, capacitar al personal para prevenir situaciones de riesgo para los niños y seguir aplicando la normatividad institucional del servicio de guarderías en todas las modalidades.

Pero también, se acordó que la Coordinación del Servicio de Guardería Para el Desarrollo Integral Infantil de la Dirección de Prestaciones Económicas y Sociales del IMSS desarrollaría una metodología específica para las visitas que realice a las guarderías de prestación directa el Mecanismo de Participación Social, integrado por padres de familia y Transparencia Mexicana para la inspección de seguridad.

“Se facilitarán las visitas del Mecanismo de Participación Social con padres de familia cuando se cuente con una metodología ad hoc, ya que dicho mecanismo debe servir para que los padres se familiaricen con la guardería, especialmente las medidas de seguridad, sin interferir en las actividades de la guardería ni fungir como una supervisión a los trabajadores”.

En la citada memoria documental del servicio de guarderías, no se especifica si estas medidas llegaron a implementarse ni si se elaboró el documento a modo solicitado por el sindicato.

Regreso a la adjudicación directa

A raíz del incendio de la Guardería ABC, el IMSS ha tenido dificultades para subrogar el servicio de guarderías a través de licitaciones públicas, por lo que regresó al esquema de adjudicaciones directas durante el sexenio de Enrique Peña Nieto, como reporta la Memoria Documental “Guarderías del IMSS”.

De acuerdo con proyecciones del Seguro Social, la demanda potencial de guarderías es de más de un millón de espacios, actualmente se cubren arriba de 243 mil, por lo que la brecha de cobertura entre la demanda y la oferta es del 77%.

Esto sin contar las 2.4 millones de trabajadoras del hogar que serán afiliadas al Seguro Social ni los 300 mil espacios en riesgo de perderse en las estancias infantiles de la Secretaría del Bienestar, que llevará a los padres de familia a buscar alternativas, como pagar a alguien para que los afilie y tener acceso al servicio de guarderías.

Además, en el citado documento se informa que cada año se pierde el 1% de la capacidad instalada por cierres de guarderías (2,431 espacios) ya sea por decisión de los dueños o porque incumplieron los requisitos de seguridad. La anterior administración federal no pudo cumplir la meta de abrir 47 mil nuevos espacios, en guarderías, logrando solo 43 mil 188, a septiembre de 2018.

Fracasan las licitaciones

La Guardería ABC, incendiada el 5 de junio de 2009 en Hermosillo y que dejó un saldo de 49 niños muertos, fue adjudicada de manera directa a sus propietarios y ésta ha sido señalada como una de las razones por las que no cumplió los requisitos para su operación.

Es por ello, que después del incendio, el IMSS empezó a licitar los contratos de subrogación de guarderías.

En abril de 2015, el IMSS abrió una licitación de 76 partidas, pero solo se adjudicó 1 guardería; en una segunda ronda se otorgaron 11 contratos, quedando 60 pendientes, por lo que el Consejo General del Instituto decidió regresar al esquema de adjudicación directa, logrando adjudicar 8 contratos, al amparo del artículo 41, fracción VII de la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Servicios del Sector Público. A los prestadores del servicio se les exigió cumplir los mismos requisitos establecidos en la licitación.

La adjudicación directa mostró una efectividad del 35% contra el 1.3% de las licitaciones púbicas, por lo que este modelo se siguió replicando a lo largo del sexenio pasado.

En 2019 deben renovarse 334 contratos que significan 29 mil 878 lugares y no está claro si el Seguro Social seguirá optando por la adjudicación directa para cubrir la demanda mínima del servicio de guarderías. Sobre toda la información de este artículo, se solicitó información al IMSS, a través de su delegación en Sonora, sin que hasta el cierre de la edición se hubiera recibido respuesta.